Agencia de Noticias AhlulBayt (ABNA): Las calles de España se llenaron el sábado de banderas palestinas y consignas como "¡Boicot a Israel!" y "¡Palestina libre!", en una jornada de protestas que reunió a multitudes diversas en más de 70 ciudades. Organizadas por la Red de Solidaridad contra la Ocupación de Palestina (Rescop) y más de 600 entidades, sindicatos y organizaciones, las manifestaciones exigieron el fin del comercio de armas con Israel, la ruptura de relaciones diplomáticas y sanciones internacionales, en un momento en que el conflicto en Gaza, desatado tras los ataques de Hamás en octubre de 2023, ha dejado más de 66.000 muertos, según datos oficiales.
En Barcelona, unas 70.000 personas, según la Guardia Urbana –aunque los organizadores hablan de 300.000–, marcharon desde los Jardinets de Gràcia hasta el Arc de Triomf, superando con creces los 28.000 asistentes de la reciente Diada catalana. Este dato refleja un cambio en las prioridades sociales de Cataluña, donde la causa palestina ha ganado terreno frente al independentismo. El alcalde Jaume Collboni participó de forma discreta, mientras que Oriol Junqueras, líder de Esquerra Republicana, denunció la falta de acceso consular a los españoles detenidos en la flotilla, incluido un concejal de su partido. Gemma Tarafa, de los Comunes, reclamó un "boicot total" a Israel, y Su Moreno, de la CUP, criticó la "normalización del secuestro" de activistas como la diputada Pilar Castillejos. Por la tarde, una segunda marcha en Drassanes, con unos 2.000 manifestantes, derivó en altercados: ataques a locales de Zara y Starbucks, considerados "colaboracionistas", provocaron cargas de los Mossos d'Esquadra, con ocho detenidos y 20 agentes con heridas leves. La acampada en el puerto de Barcelona se mantendrá hasta la huelga convocada para el 15 de octubre.
En Madrid, unas 92.000 personas, según la Delegación del Gobierno –y 500.000 según los organizadores–, recorrieron el trayecto de Atocha a Callao, coreando lemas contra Benjamín Netanyahu, Isabel Díaz Ayuso y el alcalde José Luis Martínez-Almeida. Ione Belarra, de Podemos, exigió la ruptura total de relaciones con Israel y denunció el "secuestro ilegal" de tres miembros de su partido, incluida Alejandra Martínez, en huelga de hambre en una prisión israelí. La ministra de Sanidad, Mónica García, también acudió a la marcha. Voces como la de Eva Garzón, de 46 años, destacaron el impacto de la flotilla: "Ha puesto los ojos del mundo en Gaza", mientras que Fatiha Mountie Amal, una ingeniera marroquí, afirmó que "no salir a la calle es ser cómplice".
Valencia reunió a 10.000 manifestantes con pancartas como "Israel genocida, España patrocina". En Sevilla, más de un millar de personas, acompañadas por el cineasta Alberto Rodríguez y el actor Antonio de la Torre, expresaron escepticismo ante el plan de paz de Donald Trump, al que consideran una "tapadera". Otras ciudades como Granada, Córdoba, Málaga, Vigo, Pamplona –con la presencia de la presidenta navarra María Chivite–, León, Talavera de la Reina y Santander también fueron escenario de protestas. En Vigo, los manifestantes simularon los cuerpos de niños gazatíes para visibilizar las 18.000 muertes infantiles en el conflicto.
Las protestas responden al asalto de Israel a la Flotilla Global Sumud, que zarpó desde Barcelona con ayuda humanitaria y fue interceptada en aguas internacionales. Más de 50 españoles, entre ellos la exalcaldesa Ada Colau, permanecen detenidos. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, expresó su preocupación por su situación. Los manifestantes rechazan el plan de paz propuesto por Trump, al que ven como una maniobra para perpetuar la violencia. Estas movilizaciones, respaldadas por partidos a la izquierda del PSOE, reflejan un amplio apoyo social a la causa palestina, aunque muchos consideran las acciones del Gobierno de Pedro Sánchez, que reconoció a Palestina en 2024, insuficientes frente a la magnitud de la crisis.
Su comentario