Las fuerzas populares iraquíes convocan una ‘marcha millonaria’ para despedirse de Al-Muhandis asesinado por EE.UU.

Según la Agencia Noticiosa Ahlul Bait (ABNA) - El viernes, la Fuerza Aérea de EE.UU. asesinó en Bagdad, capital iraquí, al comandante de la Fuerza Quds, del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el teniente general Soleimaní, y el subcomandante de las Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe), Abu Mahdi Al-Muhandis.

“Al-Hashad Al-Shabi pide a los ciudadanos iraquíes, figuras prominentes, líderes de tribus, y clérigos asistir a la ceremonia fúnebre de Abu Mahdi al-Muhandis en la ciudad de Basora, desde donde comenzarán una procesión hacia la ciudad santa de Nayaf para su entierro”, han llamado las Unidades de Movilización Popular de Irak en una serie de mensajes publicados en Twitter.

La sepultura de Abu Mahdi al-Muhandis en Nayaf se demoró debido a que el cadáver fue transportado a Irán para realizar análisis de ADN, y luego devolverlo a Irak.

En este sentido, Al-Hashad Al-Shabi ha anunciado que las pruebas de ADN en Irán han sido completadas y que los restos de Al-Muhandis regresarán el martes a la ciudad de Basora.

El Gobierno de Bagdad ha condenado los ataques aéreos de EE.UU. contra los comandantes de la Resistencia y han afirmado que tanto el general Soleimani como las fuerzas populares iraquíes han desempeñado un rol significativo en la lucha contra el terrorismo del Daesh.

Autoridades iraquíes denuncian que los ataques de EE.UU. violan la soberanía y los convenios de seguridad firmados con la llamada coalición internacional, dirigida por los Estados Unidos.

Como una forma de responder a estas violaciones, el domingo, el Parlamento iraquí aprobó una moción que pide la expulsión de las tropas estadounidenses desplegadas en el país y obligó al Gobierno a hacer público cualquier acuerdo sobre la presencia de militares extranjeros en el país.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán advirtió que el país persa tomará una “venganza severa” por el asesinato del general Soleimaní. “Su fallecimiento no detendrá su misión, pero los criminales que han manchado sus manos con la sangre del general Qassim Soleimani y de otros mártires en el ataque deben esperar una dura venganza”, subrayó el Líder Supremo de la Revolución Islámica.

Otras autoridades iraníes alertan que el asesinato del general Soleimaní sellará el fin de la presencia militar de EE.UU. en el Oeste de Asia y que el mundo islámico y el Eje de Resistencia le asestarán un duro golpe a Washington para vengar su crimen.


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