Agencia Noticiosa Ahlul-Bait (P)

Fuentes : PressTV / ABNA24
viernes

24 julio 2020

6:42:14
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“Grupos de derechos humanos instan a Bahréin a detener la ejecución de manifestantes”

MANAMA. (ABNA) – La imagen muestra a los ciudadanos de Bahréin, Muhammad Ramadán (izq.) y Hussain Musa, que han sido condenados a muerte.

Según la Agencia Noticiosa Ahlul Bait (ABNA) - Dieciséis grupos internacionales y de derechos humanos de Bahréin han instado al rey Hamad bin Issa Al Jalifa de Bahréin a conmutar las penas de muerte impuestas a dos ciudadanos, destacando que la pareja que sufrió supuesta tortura no recibió un juicio justo.

En febrero de 2014, las fuerzas de seguridad de Bahréin detuvieron a Hussain Musa, de 34 años, y Muhammad Ramadán, de 37, acusándolos de atacar a la policía "con fines terroristas" y de un presunto atentado ese año en la aldea de Ad-Dair que provocó la muerte de un policía.

En diciembre de ese año, Musa, un empleado del hotel, y Muhammad Ramadán, un guardia de seguridad en el Aeropuerto Internacional de Bahréin, fueron inicialmente condenados a muerte por un tribunal penal.

La pareja apeló las sentencias y el caso fue remitido al Tribunal Superior de Apelaciones en lo Penal, que confirmó los veredictos en marzo de 2015. Ocho meses después, el caso llegó al Tribunal de Casación que confirmó los fallos.

Las penas de muerte fueron anuladas después de la aparición de un informe médico previamente no revelado por el Ministerio del Interior de Bahréin. El informe, según Human Rights Watch (HRW), parecía corroborar las afirmaciones de que ambos hombres habían sido torturados para dar confesiones falsas.

Sin embargo, un tribunal de apelaciones finalmente reinstauró las condenas de muerte en enero de 2020, y a principios de este mes, el Tribunal de Casación de Bahréin las confirmó contra los dos activistas contra el régimen.

Dirigiéndose al rey de Bahréin, la carta de 16 grupos de derechos humanos , incluidos HRW y Amnistía Internacional , lo instó a no ratificar las condenas de muerte impuestas a Moosa y Ramadán, y a garantizar que no se ejecuten.

"Hay otros 10 detenidos en Bahréin condenados a muerte y que corren un riesgo inminente de ejecución en espera de su ratificación [...] Bahréin debería unirse a los muchos países ya comprometidos con la resolución de la Asamblea General de la ONU del 18 de diciembre de 2007 que pide una moratoria de las ejecuciones, con el objetivo de abolir la pena de muerte", dijeron los grupos de derechos en la carta.

Agregaron: "Por lo tanto, lo instamos a: establecer inmediatamente una moratoria oficial de las ejecuciones con miras a abolir la pena capital en Bahréin; conmutar todas las penas de muerte pendientes a penas de prisión y realizar una revisión exhaustiva del corredor de la muerte de Bahréin, con una vista para asegurar que las víctimas de abusos de derechos humanos ilegalmente condenados a muerte reciban reparación".

Ambos acusados dijeron que sus confesiones habían sido obtenidas bajo tortura y que ninguno de los dos pudo reunirse con su abogado en ningún momento antes del juicio.

"El rey Hamad de Bahréin debería corregir este grave error judicial y garantizar que Hussein Ali Musa y Muhammad Ramadán no sean ejecutados", dijo Joe Stork, subdirector de Oriente Medio en HRW.

De acuerdo con la ley de Bahréin, después de que el Tribunal de Casación confirma una sentencia de muerte, el fallo se envía al rey, quien tiene el poder de ratificar la sentencia, conmutarla o conceder un perdón.

Al menos otros diez detenidos, condenados a muerte, están tras las rejas en las cárceles de Bahréin y corren un riesgo inminente de ejecución a la espera de la ratificación del rey Hamad.

A principios de este mes, Amnistía Internacional lamentó que los últimos esfuerzos por ver un mínimo de justicia en Bahréin fueron aplastados cuando el Tribunal de Casación reafirmó las penas de muerte para Musa y Ramadán, a pesar de las pruebas de que fueron torturados durante su interrogatorio.

Bahréin ha visto protestas contra el régimen en los últimos nueve años. La principal demanda ha sido el derrocamiento del régimen de Al Jalifah y el establecimiento de un sistema justo y concluyente que represente a todos los ciudadanos de Bahréin.

El régimen de Manama, a cambio, ha ignorado los llamados y sigue adelante con su represión y persecución de los defensores de los derechos humanos y los disidentes políticos.

Traducido en exclusiva por ABNA24 redacción española

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