“Durante los últimos 10 años, hemos sido testigos de inmensas conspiraciones en el mundo musulmán y árabe [...], conspiraciones con horribles repercusiones, por decirlo así”, afirmó el martes el líder del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), durante su intervención por videoconferencia en la apertura de la 35.ª Conferencia Internacional de la Unidad Islámica, celebrada en Teherán (capital iraní).
Nasralá indicó que la comunidad musulmana ha soportado días y años difíciles, pero, por primera vez durante estos años, “se sintió como si el mundo musulmán y las naciones musulmanas y sus relaciones hubieran llegado al borde de un precipicio”. Eso era, conforme al líder de Hezbolá, “lo que buscaba la arrogancia global, encabezada por Estados Unidos y el régimen sionista”.
Sin embargo, enfatizó, el mundo musulmán sobrevivió a los intentos de división gracias a los esfuerzos por preservar su unidad. Estos esfuerzos se remontan al impulso unificador que surgió con la victoria de la Revolución Islámica de Irán en 1979, dijo el secretario general de Hezbolá.
“Las consignas y las ideas que promueven la unidad tomaron forma en ese entonces. Estos esfuerzos duraron a lo largo de estos años consecutivos, fortalecieron la unidad entre las naciones musulmanas y provocaron mucha convergencia entre los musulmanes”, subrayó Nasralá, resaltando que “logramos resistir los terremotos a los que se enfrentó nuestro mundo como resultado de esta unidad y poder de lucha”.
Con todo esto, advirtió que las tramas y amenazas continúan existiendo, y la arrogancia mundial mantiene sus “esfuerzos divisivos”.
La 35.ª Conferencia Internacional de la Unidad Islámica comenzó el martes en Teherán con un enfoque a favor de la paz en una región que sufre interminables crisis. Más de 500 clérigos y pensadores chiíes y suníes de 39 países participaron en el evento de una semana.
La conferencia anual está organizada por el Foro Mundial para la Proximidad de las Escuelas de Pensamiento Islámicos, con sede en Irán. Este evento marca la Semana de la Unidad Islámica, que coincide con el aniversario del nacimiento del Profeta del Islam, el Profeta Muhammad (paz sea con él), como un eje que une a los musulmanes.
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