El Sr. Ali Vafadar comento que el cine es una industria cara, de capital intensivo. «A tal punto que algunos directores y cineastas en occidente recurren a los sionistas para apoyo financiero, y a sabiendas o sin saberlo, caen en la trampa política de los Sionistas de expansión de la Islamofobia».
«Algunos festivales internacionales además fomentan esta tendencia al seleccionar películas Islamofobicas», añadió el cineasta.
Vafadar destacó el hecho de que existan muchas películas en contra del Islam en Occidente cada año, y que nadie consienta el hecho de producir películas en las cuales se cuestione el sionismo o el holocausto.