El nombre de la sura 29 del Corán es Al-Ankabut (la araña), ya que el insecto se menciona en el versículo 41 del capítulo.
En este versículo, la idolatría de los incrédulos se compara con confiar en una telaraña:
Quienes toman amigos en lugar de tomar a Alá son semejantes a la araña que se ha hecho una casa. Y la casa más frágil es la de la araña. Si supieran... (41)
Se dice en la interpretación de este versículo que la comparación pretende mostrar que adorar ídolos no beneficia a los incrédulos y no puede salvarlos de daños y dificultades.
La primera parte de la Sura trata sobre el tema de la prueba divina y el estado de Munafiqin (el hipócrita). Estos dos temas están relacionados porque no es posible conocer al hipócrita sin probarlo.
Otra parte del capítulo trata sobre el Tawhid (monoteísmo) y los signos de Dios en el mundo, así como la lucha contra Shirk (politeísmo).
La última parte de Surah Al-Ankabut explica la debilidad y la incapacidad de las deidades e ídolos falsos, diciendo que son firmes y duros en apariencia pero incapaces de resolver problemas. También habla de la grandeza del Corán y la veracidad del Santo Profeta.