“Israel” y Marruecos normalizaron sus relaciones diplomáticas en diciembre de 2020 parte del llamado Plan Abraham, en cuyo marco algunos países árabes establecieron lazos con Tel Aviv.
La intimación entre ambos países suma otro elemento combustible a la colisión entre Marruecos y Argelia, que apoya a los palestinos en su demanda de un estado propio y a la República Árabe Saharaui Democrática, que busca establecer un estado independiente en el Sáhara Occidental.
Resulta significativo, además, que el anuncio siga al ascenso al poder en “Israel” de un Gobierno considerado el más derechista y agresivo de su historia tras el triunfo en las elecciones legislativas de noviembre pasado de una coalición ultraderechista encabezada por el primer ministro Benjamin Netanyahu.