Dijo, Imam Sadiq (P): Debes ser humilde delante de Dios (swa) en público o en privado, de maneras apropiadas, y presentar tu vida ante Él en tu ayuno, y liberar tu corazón de todo por el amor de Dios (swa), y dedicarte a cumplir lo que ha ordenado. Luego, si realizaste estas acciones completamente, entonces has cumplido la realidad del ayuno para Dios (swa), y has establecido lo que Él ha ordenado. Pero si no cumples con las acciones mencionadas, ellas se deducirán para las recompensas y las bendiciones del ayuno. Porque el ayuno, no es sólo evitar comer y beber, sino que Dios (swa) lo ha puesto como un obstáculo para el comportamiento y el decir, que hacen que el ayuno sea nulo (Batel). Muy pocos en número son los que verdaderamente ayunan, y muchos los que sólo soportan hambre [1].
[1] Wasa'elul Shia, vol. 10, página 166.