Sura 89. Al-Fayr (El Alba) (árabe: سورة الفجر) es la sura 89 del Corán. Es un sura maquense ubicada en el 30º yuz' del mismo. "Fayr" significa literalmente amanecer, por lo que Dios jura en el primer verso de esta sura. En las exégesis del Corán basadas en hadices, el "amanecer" se ha interpretado como Imam al-Mahdi (a), el Duodécimo Imam shiíta.
Al-Fayr se conoce como la Sura del Imam Hussain (P) porque, basado en un hadiz del Imam Sadiq (P), la frase Nafs Mutmainna (alma satisfecha, alma tranquila) en el versículo 27 se refiere al Imam Hussain (P). Además, según algunas interpretaciones del Corán, la frase Layalin Ashr (las diez noches) se refiere a las primeras diez noches del mes lunar Hiyri de Muharram (el Imam Hussain (P) fue martirizado el 10 de Muharram).
Sura al-Fayr hace referencia al destino de la gente de Ad e "Iram [un jardín] - con pilares elevados", así como a la gente de Thamud y la gente del Faraón, y sus corrupciones y transgresiones. Recuerda que las personas siempre están sujetas a las pruebas divinas; son probados con bendiciones y sufrimientos. Luego declara las razones por las cuales los incrédulos fallan en la prueba. También apunta al día del juicio cuando los incrédulos aprenden una lección al ver las señales del Infierno, pero es inútil porque es demasiado tarde.
Surah Al-Fayr critica amar las riquezas mundanas que provocan rebelión y negligencia y advierte a aquellos que prefieren este mundo al más allá del castigo en este mundo y en el próximo.
Señala que cuando se les dan bendiciones, la gente dice que es porque Dios los ha honrado y cuando se les dan dificultades, como la pobreza y la indigencia, piensan que Dios los ha deshonrado.
Pero el hecho es que cuando a alguien se le da riqueza o poder, o cuando a alguien se le da pobreza, es por prueba divina para que a través de tales pruebas, pueda determinar cuál será su situación en el más allá.
Así que las bendiciones o las adversidades que uno enfrenta en este mundo son pruebas divinas.
De entre todas las personas, alcanzará la salvación en el más allá quien tenga Nafs Mutmainna y frente a las pruebas y adversidades, haya paz en su corazón con el recuerdo de Dios.