Así como en el establecimiento de los derechos de la mujer, hace más de 14 siglo atrás, destacando el rol y la importancia que tiene la mujer en la sociedad como mujer, como madre, como líder, desembocó también en la historia épica de Ashura, aquel gran levantamiento que se originó precisamente con la proeza, la valentía heroica, del Imam Hussain (P), su martirio y los mártires de Karbalá, en realidad su asesinato y los trágicos acontecimientos que la acompañaron, ya que el movimiento que inició nunca morirá y continuará más vivo que nunca, y esto también gracias al importante papel de mujeres valientes, las cuales de una u otra forma, han creado un modelo épico para las mujeres en el mundo.
Y encontrándonos en este décimo día del mes de Muharram, Ashura, día del martirio del Imam Hussain (P),”El Señor de los Mártires”, quién se sublevó a la dictadura de Yazid, hijo de Muawiayah, en una batalla no proporcional, enfrentándose a un ejército de 40.000 hombres; mientras siendo ellos sólo 72 en la batalla de Karbalá y esa fuerza, ese valor, ese coraje es digno de admiración; pues la revolución que inició continúa y continuará por siempre, en favor de los más débiles del mundo, siendo también acompañada por la valentía y el coraje de las mujeres, de hecho, la historia de Ashura tiene muchas lecciones con respecto al importante papel que juega la mujer en la sociedad.
Es por ello, que iremos mencionando a mujeres destacadas, quienes participaron en su rol protagónico, en este gran movimiento de Ashura, que desembocó de la proeza de un gran hombre, como lo es el Imam Hussein (AS), la luz que no se apagó.
Dentro de estas mujeres, se puede destacar a la hermana del Imam Hussain (AS), señora Zainab (P) quien estuvo acompañando y apoyando en todo momento a su hermano, la que estuvo presenciando toda la masacre de Karbala, quien también lloró junto a su hermano, y presenció su decapitación, al igual de sus sobrinos, primos, y los demás mártires, al igual que fue la gran mujer que se encargó de tranquilizar a todas las demás niñas, y mujeres quienes se encontraban en las tiendas del campamento. Además de ello, se debe destacar, que fue ella, quien se encargó de transmitir y difundir el mensaje verdadero de Ashura, alzando su voz ante un pueblo y ante el usurpador del califato denunciando la mentira y la tiranía, haciendo saber la verdad; pues a ella se le debe la primera transmisión de estos hechos históricos, de hecho, los mensajes del levantamiento de Ashura fueron difundidos entre la gente a través de sus valientes y elocuentes discursos en Kufa y Sham, erigiéndose como un símbolo y modelo para todas las mujeres y los hombres amantes de la libertad del mundo, por ello es que también se la conoce como la gran abanderada y emancipadora de la gesta libertaria de los sucesos de Karbalá .
Zainab (P) vio que el Califa Yazid tenía la cabeza del Imam Hussain (AS) en una bandeja. Cuando Zainab (SA) vio esta muestra de arrogancia de Yazid, se levantó y se dirigió valientemente a todos en el palacio diciendo:
“Lo que hoy consideras como despojos de guerra se convertirán en ruinas para ti mañana y ese día cosecharás lo que has sembrado. Dios no oprime a sus siervos. Expreso mi queja y pongo mi confianza solamente en Dios. Haz lo que quieras, Yazid, nunca podrás borrar lo que has hecho y no lograrás que la gente nos olvide. Aquí te digo, que tus decisiones serán fallidas, tu período de gobierno será corto, y su población se dispersará. En ese día, una voz gritará: ¡Que la maldición de Dios caiga sobre los opresores! …”[1].
Otra mujer ejemplar en la historia épica de Ashura fue Tu’ah, la única mujer que apoyó a Muslim Ibn Aqil (AS), en el momento del peligro, el primo del Imam Hussain (AS), el emisario que cayó mártir en Kufa, cuando todos los kufanos lo dejaron solo y su vida estaba en peligro, fue precisamente Tu’ah, quien era una anciana, la que le dio refugio. Tras esta abnegación, el nombre de Tu’ah permaneció para siempre en la historia como la primera mujer en apoyar el levantamiento de Ashûra[2].
También de entre estas mujeres valientes, se puede destacar a la esposa de Zuhair Ibn Qin, quien durante toda su vida seguía un camino diferente al del Imam Hussain (AS); sin embargo, fue persuadido por su esposa para que acepte la invitación del Imam, ella se despidió de su esposo con los ojos llorosos, y le dijo: “Que Dios te ayude y te dé mucha recompensa por este viaje. Por favor, no te olvides de interceder por mí en el día de la Resurrección, cuando estarás con el abuelo del Imam Hussain (AS), el Profeta Muhammad (BPD) ”[3].
En cuanto al papel protagónico de la mujer en el levantamiento de Ashûra, cabe mencionar el nombre de Umm Wahab, la esposa de Abdul-lah Ibn ‘Umair al-Kalbi, quien fue la única mujer en alcanzar el martirio en el Suceso de Ashûra.
En este instante, Umm Wahab que estaba observando la lucha de su esposo, se dirigió hacia el campo de la batalla para unirse a su esposo en el combate, pero puesto que no tenía armas, tomó el pilar de la carpa utilizándolo como un arma. Entonces, llamó a su esposo en voz alta: “¡Que mis padres sean sacrificados por ti! Lucha y defiende a la familia del Mensajero de Dios (PBD).” Sin embargo; cuando llegó a su esposo, él ya había alcanzado el martirio. Al ver el cuerpo mutilado de su esposo, ella le dijo: “Te felicito por tener el placer de entrar al Paraíso. Pido a Dios, quien te otorgó la recompensa del Paraíso que me dé la oportunidad de unirme a ti.” En este instante, el esclavo de Shimr Ibn Zil-Yushan la atacó y la golpeó en la cabeza con una barra de hierro; y de esta manera, la súplica de Umm Wahab fue respondida y ella alcanzó el martirio al lado del cuerpo de su esposo. Umm Wahab fue la única mujer en martirizarse en la batalla de Ashûra[4].
Sin lugar a dudas, que el estudio de la historia de estas mujeres, las que tuvieron un rol en este levantamiento de Ashura, el cual continúa vivo también gracias a ellas, nos enseña valiosas lecciones acerca de la dignidad, la paciencia, la persistencia y la resistencia en el camino de Dios, apoyando, denunciando y combatiendo en todo momento a favor de la lucha en contra todo tipo de injusticia, opresión y tiranía; pues hay que afirmar que las mujeres de Karbalá, al igual que los hombres que lucharon contra el enemigo, desempeñaron su papel para desarrollar y hacer florecer el movimiento del Imam Hussain (P).
Los grandes esfuerzos de señora Zainab (SA), la hermana del Imam Hussain (AS), la hija del Imam Ali (AS), y los de las otras mujeres que estaban presentes en el suceso de Ashûra, son en verdad unos pasos importantes en la continuación de la gran revolución que encaminó la mujer del profeta Jadiya (SA) y su hija, Fátima Az-Zahra (SA), que en su biografía se señala que “Es quien con su firmeza afirmó el valor de la mujer”, “La señora de las mujeres del universo”, por ser un testimonio de pureza, representatividad del ideal de la mujer, su gran importancia radica en ser la transmisora de la sucesión de la familia del Profeta (PBD), fue la madre del Imam Hasan (AS) y del Imam Hussain (AS), y esposa del primer Imam shiíta, Alí Ibn Abi Talib (AS).
No cabe duda, que nadie puede negar el papel y la importancia de la mujer en el desarrollo del Islam, en la implementación de la justicia, la sabiduría, y la valentía, y este es un gran ejemplo ante el mundo en su papel, en su rol en el gran levantamiento épico de Ashura, el que como lo dijimos continúa vivo, y el que está lleno de lecciones sabias, y así hasta enfocar también el papel de la mujer en la Revolución Islámica de Irán, el cual, mostró la verdadera jerarquía de las mujeres en el Islam convocándolas a cumplir sus obligaciones, y remarcó la importancia de esclarecer el verdadero significado del Islam.
Pues; también debemos destacar esta Revolución le devolvió su identificación de mujer musulmana, su retorno a su identidad original, la que estaba siendo arrebatada por el régimen usurpador que la marginó, pero el Imam Mahdi elevó la posición de la mujer y su papel en la Revolución Islámica, hasta señalar que fueron ellas las que hicieron la Revolución.
“Estas mujeres descubrieron la liberación y el potencial en la doctrina islámica”[5].
Y en palabras del Imam Jomeini “Las mujeres son soldados anónimos. Ellas no sólo tienen expectativa de una posición o un cargo por el trabajo que hacen, sino que son soldados desconocidas, quienes están haciendo la Yihad en el frente, sin ningún temor, con valentía por el amor al Islam”[6].
Notas:
[1] “Zainab al Kubra (P), emancipadora de la gesta libertaria después de los sucesos de Karbalá”; Leer más en: https://es.shafaqna.com/2019/10/19/zainab-al-kubra-p-emancipadora-de-la-gesta-libertaria-despues-de-los-sucesos-de-karbala/
[2] Az to So’al Mikonand, página 56. Ética Islámica en Nahyul Balaga, tomo 1, página 406.
[3] Malhuf, página 133; Bihar al-Anwar, tomo 44, página 371. Ashura: raíces, objetivos, eventos y resultados, página 446.
[4] Absar al-‘Ain, página 106; Tarij Tabari, tomo 4, página 327; Bihar al-Anwar, tomo 45, página 17.
[5] A. Ezzati M.A. “El Islam Revolucionario y la Revolución Islámica” Ed. Al Hada, 2001, pág. 198-207.
[6] Saavedra Alfaro Sdenka; “Mujer; Yunque forjador de la Revolución Islámica de Irán