Dios culpa este comportamiento en muchos versículos y a veces promete el castigo del infierno:
“aquellos que guardan con avidez lo que Dios les da por Su gracia, no lo consideren bueno para ellos. Al contrario, es malo para ellos, en el Día de la Resurrección, se atarán al cuello lo que han guardado con avaricia. Es Dios quien tiene la herencia de los cielos y la tierra. Y Dios es consciente de lo que hacéis” (Corán 3:180)
La principal causa de estos pecados es la fe débil y la falta de confianza en Dios. Una persona que considera a Dios capaz de todo, debe considerar a Dios como la fuente de todas las bendiciones.
El Imam Ali (p) dijo:
“La avaricia se debe a la falta de confianza en Dios (Sus promesas y Su poder sobre todas las cosas)”
La codicia no se trata solo de posesiones. A veces hay personas que se niegan a compartir su conocimiento, se niegan a pagar Jums y zakat, e incluso son tacaños en los saludos, como dijo el Profeta. Es natural que una persona avara pierda la simpatía de la gente y esté condenada a estar sola.
El avaro quiere todo lo bueno para sí mismo y no para los demás, y lo demuestra constantemente. Siempre permanecerá solo, en sociedad, porque todos saben que nada bueno saldrá del avaro, y lo evitan.
Es quizás por esta razón que el Imam Ali (p) dijo:
“El avaro no tiene apoyo ni amigo”