Hablando en un seminario centrado en el Santo Profeta (Bpd), el investigador Mohammad As'adi, destacó algunos de estos rasgos. He aquí un resumen de sus observaciones: Durante el período en que el Profeta Muhammad (PBUH) fue elegido como profeta, la sociedad luchaba con la falta de una moral y una cultura adecuadas y la pobreza prevalecía en todos los aspectos de la vida. A pesar de la ausencia de medios de comunicación modernos, logró difundir el mensaje de monoteísmo e igualdad por todo el mundo, transformando una sociedad arraigada en la ignorancia (la sociedad Jahili) en una comunidad modelo con altos estándares morales. Por lo tanto, creo que puede resultar esclarecedor comprender las cualidades de este individuo extraordinario, que fue capaz de atraer numerosos seguidores a su fe y forjar una nación en circunstancias difíciles. Sin duda, la clave de la popularidad del Profeta, quien expresó la misión de promover la dignidad humana y la excelencia moral y quien demostró una excelente conducta moral, residió en su comportamiento y ética. Fueron sus interacciones con la sociedad las que crearon tal atractivo magnético. Para aclarar esto aún más, describiré algunas de sus características. La primera característica notable del Profeta (la paz sea con él) que contribuyó significativamente a su atracción fue su fe inquebrantable en los principios que predicaba. El Corán da testimonio de su fe inquebrantable en las revelaciones divinas, y todos los creyentes hicieron lo mismo, teniendo fe en Dios, los ángeles y los libros de los profetas de Dios. La segunda cualidad destacable fue su capacidad de amistad, tolerancia y paciencia. La tolerancia, fundamentalmente, es un principio fundamental que asegura la estabilidad y cohesión de cualquier sociedad. Es poco probable que un líder o figura de autoridad pública que carezca de tolerancia y opte por el rigor hacia su pueblo mantenga la estabilidad. El Profeta Muhammad (pbd) enfatizó que después de la fe en Dios, la tolerancia con las personas es el pináculo de la razón, la racionalidad y la seriedad. La bondad del Profeta es otra característica sorprendente. El Corán reconoce esta cualidad: “Sólo a través de la Divina Misericordia has podido (Muhammad) tratar a tus seguidores con tanta amabilidad”. (Sura Al-Imran, versículo 159) La capacidad del Profeta para perdonar representa otro rasgo distintivo. Aunque enfrentó una extensa persecución durante su estancia de trece años en La Meca y soportó dificultades junto con sus seguidores, mostró un perdón notable. Cuando los musulmanes finalmente conquistaron La Meca, algunos estaban ansiosos de venganza, pero el Profeta les ordenó declarar: "Hoy es el Día de la Misericordia". En consecuencia, cuando el pueblo de La Meca se reunió en la Masyid al-Haram y el Profeta se dirigió a ellos, declaró su libertad colectiva. Este acto compasivo llevó a muchos antiguos adversarios a abrazar el Islam. Finalmente, la humildad del Profeta fue un atributo digno de mención. Comía con esclavos, se sentaba con ellos y se consideraba un siervo de Dios: no veía el trato con los menos privilegiados como un defecto, sino como un signo de su magnanimidad. Esta humildad ha sido un factor convincente para atraer gente y fomentar una comunidad fuerte.
Fuentes : Iqna
lunes
23 octubre 2023
22:08:28
1404407
TEHERÁN. (ABNA) – El Profeta Muhammad (pbd) tenía una serie de rasgos y cualidades que lo hicieron popular y exitoso en su misión.