Agencia Noticiosa Ahlul-Bait (P)

Fuentes : IQNA
domingo

24 marzo 2024

10:45:55
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La función del Ramadán y el ayuno para ordenar la vida del hombre en el mundo moderno

SANTIAGO. (ABNA) - La función del Ramadán y el ayuno para ordenar la vida del hombre en el mundo modernoa urgentemente una oportunidad para hacer una pausa y reconsiderar su posición en el camino de la vida.

 Cada año, después de 11 meses, el mes de Ramadán ofrece esta oportunidad al hombre contemporáneo. 

Ayunar y renunciar a algunos placeres en este mes, mayor atención a los ciclos de la naturaleza como el amanecer y el atardecer (que marcan el inicio y el final del ayuno) y las oraciones diarias vinculadas a estos ciclos, el mayor énfasis en la caridad y las obras caritativas, y en general la carga espiritual de este mes, contribuye enormemente a la reflexión del hombre sobre su propia existencia y a corregir los aspectos personales y sociales de su vida.

 La misión del Ramadán es devolver al hombre al camino principal en todas las circunstancias. Naturalmente, el acercamiento a este mes debe realizarse tanto en el marco de las cuestiones personales y sociales, como en la consideración del descubrimiento del verdadero estatus del hombre dentro de la creación. 

En particular, una persona que ha tenido que afrontar dilemas y problemas en diversos aspectos de la vida social puede encontrar en este mes la hoja de ruta para poner en orden este aspecto de su vida. Desde este punto de vista, la función del bendito mes del Ramadán es muy importante y es necesario que los hombres aprovechen esta oportunidad y aprovechen las oportunidades que ofrece este mes con más seriedad y con mayor compromiso. 

Una sociedad que alcance la Taharah (purificación y pureza) y se salve de la desviación gracias a las bendiciones del Ramadán será ciertamente una sociedad avanzada, ética y progresista en términos divinos.

 Dios afirma con respecto a la creación de la humanidad que creó al hombre en serio y lo hizo excepcional entre todas las demás criaturas. El mes sagrado del Ramadán, como regalo de Dios a la humanidad, también es muy excepcional y todos deben hacer lo mejor que puedan para que la función de este mes de mejorar diversos aspectos de la vida personal y social se materialice.