Este incidente tuvo lugar el 18 de Zul Hiyyah, el doceavo mes del calendario islámico y ha sido narrado por 110 compañeros del Profeta, 84 miembros de la siguiente generación (los tabi’in), y 360 eruditos musulmanes de todas las escuelas de pensamiento.
El Profeta Muhammad y aproximadamente 114,000 de sus compañeros habían realizado el Hayy (la peregrinación) y regresaban a sus hogares. Ese año, durante el Hayy, el calor era intenso y el sol ardiente se posaba sobre los pelegrinos. Cuando el Profeta llegó a Ghadir Jum, un cruce de caminos desde donde todos los musulmanes de diferentes comarcas tomarían sus propios rumbos detuvo la caravana en la medianoche y esperó a aquellos que venían detrás de la caravana, llamando a los que iban encabezando ésta, debido a que había recibido una revelación de Dios la cual tenía que anunciarle a la gente. La revelación decía:
يَآ أَيُّهَا الرَّسُولُ بَلِّغْ مَآ اُنْزِلَ إِلَيْكَ مِن رَبِّكَ وإِن لَمْ تَفْعَلْ فَمَا بَلَّغْتَ رِسَالَتَهُ وَاللّهُ يَعْصِمُكَ مِنَ النَّاسِ إِنَّ اللّهَ لاَيَهْدِي الْقَوْمَ الْكَافِرِينَ
“¡Oh Mensajero, transmite lo que ha descendido a ti procedente de tu señor! Y, si no lo haces, será como si no hubieses transmitido nada de Su mensaje y Dios te protegerá de las gentes.”[1]
Entonces, el Profeta le habló un poco al público antes de preguntarles si él verdaderamente tenía autoridad sobre ellos o no. La gente respondió, “Si, Oh Profeta, por supuesto que tú eres nuestro líder (mawla).” Él repitió esta pregunta tres veces y la gente respondió lo mismo en las tres ocasiones, reconociendo su liderazgo. Entonces llamó a Ali, sujetó su brazo, de manera que los dos brazos apuntaban hacia arriba y dijo a la gente, “De quien yo soy Mawlá, (líder), Ali es su Mawlá”
En ese momento, Ali tenía 33 años de edad. La gente recibió esta noticia con diferentes actitudes – algunos con felicidad y otros con resignación. Los primeros en felicitar a Ali fueron los futuros primer y segundo califa; el segundo califa (‘Umar) dijo, “Felicitaciones, felicitaciones a ti, Oh Ali; te has convertido en mi líder y el líder de todos los fieles musulmanes.”[2]
Después descendió otra relación al Profeta Muhammad. Al.lah dijo:
الْيَوْمَ أَكْمَلْتُ لَكُمْ دِينَكُمْ وَأَتْمَمْتُ عَلَيْكُمْ نِعْمَتِي وَرَضِيتُ لَكُمُ الإِسْلاَمَ دِيناً
“Hoy he completado vuestra religión y he consumado Mi bendición sobre vosotros y estoy satisfecho de haberos dado como creencia el Islam.”[3]
Con esta aleya se completó el mensaje del Islam, es decir con la designación del Imam Ali como sucesor del Profeta y si no hubiese sido designado para este cargo, la religión del Islam habría quedado incompleta como lo especifican estas aleyas.
La Aleya de la Amonestación (Indhār)
Tres años después de la llegada del Islam, Al.lah le ordenó al Profeta proclamar su invitación al Islam a sus parientes más cercanos en Meca:
وَأَنذِرْ عَشِيرَتَكَ الاَقْرَبِينَ
“Y amonesta a tus familiares más cercanos.”[4]
El Profeta reunió cuarenta miembros de su tribu Bani Hashim y realizó un banquete en la casa de su tío Abu Talib, con comida para ellos. Luego que terminaron de comer, el Profeta les dijo:
“¡Oh hijos de Abd al-Muttalib! Por Dios, no conozco a ninguna persona joven de entre los árabes quien le haya traído a su gente algo mejor de lo que yo les he traído. Yo les he traído lo mejor de este mundo y el próximo y Al.lah me ha ordenado convocarlos a todos. Entonces ¿quién será mi apoyo en esta misión, para que sea mi hermano, mi sucesor (califa) y legatario?” Nadie se puso de pie para aceptar esta invitación excepto Ali ibn Abi Talib, quien solo tenía 13 años de edad en ese tiempo, y dijo, “Yo seré tu apoyo en este esfuerzo.”
El Profeta le pidió que se sentara y repitió la pregunta por segunda vez. De nuevo, solo Ali se puso de pie y el Profeta le ordenó sentarse. La tercera vez el Profeta no escucho repuesta alguna de los miembros de otras familias, Ali se puso de pie y ratificó su apoyo. El Profeta colocó su mano sobre la rodilla y les dijo a los cuarenta hombres de su tribu, “Este es mi hermano, mi legatario y mi sucesor sobre ustedes, entonces escúchenlo y obedézcanle.”[5]
La Aleya de la reverencia (ruku’)
إِنَّمَا وَلِيُّكُمُ اللّهُ وَرَسُولُهُ وَالَّذِينَ ءَامَنُوا الَّذِينَ يُقِيمُونَ الصَّلاَةَ وَيُؤْتُونَ الزَّكَاةَ وَهُمْ رَاكِعُونَ
“En verdad, vuestros amigos y protectores son solamente Dios y su mensajero y aquellos que tienen fe, que hacen la oración y dan limosna mientras están inclinados rezando”.[6]
Numerosos exégetas del Corán de todas las escuelas de pensamiento coinciden en que a quien se refiere esta aleya es al Imam Ali ibn Abi Talib. El famoso comentarista, Zamajshari dice acerca de esta aleya:
“Esta aleya fue revelada en favor de Ali (que Al.lah ilumine su rostro). Cuando un mendigo le pidió limosna en la mezquita y Ali se encontraba en la posición de ruku’ durante la oración, se quitó el anillo de su dedo en dicha posición. Al parecer el anillo le quedaba muy ligero en su dedo meñique, por lo que no tuvo que realizar esfuerzo alguno en sacarlo, ya que esto habría podido anular su oración. Podríamos preguntarnos: ¿Cómo puede referirse a Ali ya que el texto está en forma plural? A esto yo diría que la forma es plural, aunque el motivo es un solo hombre, con el fin de exhortar a los demás a seguir su ejemplo y obtener una recompensa similar. También para llamar la atención hacia el hecho que los creyentes deben estar muy atentos y deben ser benevolentes con los pobres de tal manera que si la ayuda no se puede aplazar hasta después de la oración, entonces se debe otorgar inmediatamente.”[7]
De igual manera al-Wahidi, en su libro sobre los comentarios del Corán titulado, Asbab an-Nuzul, cita de la narración de Kalbi donde dice que la causa de esta revelación fue el Imam Ali. Kalbi dice, “La parte posterior de este aleya es en favor de Ali ibn Abi Talib (que Dios se apiade de él) porque él le dio su anillo a un mendigo durante el ruku’.”[8] Algunas otras exegesis también afirman que esta aleya se refiere al Imam Ali incluyendo: Sunān an-Nisa´i, Tafsir al-Kabir por Za´alibi, Musnad Ahmad ibn Hanbal, [9] Musnad ibn Marduwayh y Kanz al-’Ummal.[10]
يَآ أَيُّهَا الَّذِينَ ءَامَنُوا أَطِيعُوا اللَّهَ وَأَطِيعُوا الرَّسُولَ وَاُولِي الأمْرِ مِنْكُمْ فَإِن تَنَازَعْتُمْ فِي شَيْءٍ فَرُدُّوهُ إِلَى اللَّهِ وَالرَّسُولِ إِن كُنْتُمْ تُؤْمِنُونَ بِاللَّهِ وَالْيَومِ الاَخِرِ ذَلِكَ خَيْرٌ وَأَحْسَنُ تَأْوِيلاً
¡Oh, los que creéis Obedeced a Dios y bendecid al mensajero y a los que de vosotros tienen autoridad! Y si discutís sobre algo, remitidlo a Dios y al mensajero si creéis en Dios y en el último Día. Eso es un bien y la mejor solución[11]
Según la explicación del Profeta Muhammad, esta aleya es también una de las referencias coránicas para el liderazgo del Imam Ali después del Profeta, y ordena la obediencia a Al.lah, al Profeta y a aquellos dotados de autoridad sobre ellos. Cuando le fue revelada esta aleya al Profeta, uno de sus grandes compañeros, Yābir ibn al-Ansari preguntó:
“Oh Profeta de Al.lah! Nosotros reconocemos a Dios y a Su Mensajero, pero quienes son ¿aquellos dotados de autoridad sobre ellos (ulul-’Amr) cuya obediencia Al.lah considera igual a obedecerle a Él y a Su Profeta? El Profeta respondió: Aquellos son mis sucesores y los líderes de los musulmanes después de mí. El primero de ellos es Ali ibn Abi Talib, luego al-Hasan y al-Husain, luego Ali ibn al-Husain, luego Muhammad ibn Ali, quien es conocido como al-Bāqir. Tú, Yabir lo veras y cuando lo veas, dale mis saludos.[12] Luego Ya’far ibn Muhammad as-Sādiq, luego Musa ibn Ya’far, luego Ali ibn Musa, luego Muhammad ibn Ali, luego Ali ibn Muhammad, luego al-Hasan ibn Ali, luego aquel que lleva mi nombre, Muhammad. Y será la prueba de Dios en la tierra.
Narraciones proféticas que designan al Imam Ali como sucesor
El Profeta Muhammad les informó a los musulmanes tanto acerca de la sucesión de los miembros designados de su familia (Ahlul Bayt), de los cuales se tratará en la próxima sesión, como de la sucesión explicita del Imam Ali. Se narra del Profeta de Al.lah que dijo:
“Tienes la misma posición con relación a mí, como la tuvo Arón con respecto a Moisés, excepto que no habrá profeta después de mí.[13]
“Aquel que desee vivir como he vivido y morir como moriré y entrar al Jardín de la Bendición eterna, que Dios me ha prometido, que tome a Ali como su líder (wali), porque Ali nunca los desviará del Camino de la Verdad ni los conducirá hacia el error.”[14]
“Ali es la autoridad sobre todos los creyentes (después de mí)”.[15]
“Ali es la puerta de entrada a mi conocimiento y después de mí le explicara a mis seguidores lo que se me ha enviado. El amor por Ali es fe y la animadversión hacia él es hipocresía.[16]
“Yo soy la ciudad del conocimiento y Ali es su llave. Quien desee encontrar esta ciudad debe entrar por medio de esa llave”.[17]
“Ali es de mí y yo soy de Ali, y no hay más que Ali y yo.[18]
“El que me obedezca ha obedecido a Al.lah y el que me desobedece habrá desobedecido a Al.lah. Y el que obedezca a Ali me habrá obedecido y el que desobedezca a Ali me habrá desobedecido”.[19]
En la batalla de Khaybar los musulmanes luchaban para conquistar la fortaleza de esta ciudad. Los dos compañeros Abu Bakr y Umar habían fracasado en su intento por derrotar al enemigo, por lo que el Profeta dijo, “Le daré esta tarea a un hombre al cual Al.lah y el Mensajero aman.” Otras narraciones mencionan que el Profeta dijo, “Al.lah proporcionará la victoria por medio de quien ame a Al.lah y a Su Mensajero.” En cualquiera de los dos casos, el Profeta le asignó la tarea a Ali y Al.lah les concedió la victoria de la mano de éste.[20]
Doce lideres para suceder al Profeta
Además de las narraciones específicas que enfáticamente identifican al Imam Ali como el sucesor del Profeta Muhammad, el Profeta también es recordado por haber dicho en numerosas ocasiones que él sería sucedido por doce líderes de su tribu (Quraish). Algunas de estas narraciones son:
“El califato permanecerá en la tribu de Quraish aunque solo quedaran dos personas en la tierra.[21]
“Disfrutaba de la compañía del Profeta junto con mi padre y lo escuché decir, “Este califato no concluirá sino hasta haber llegado el doceavo califa de entre ellos.” El narrador dijo, “Entonces él (el Profeta) dijo algo lo cual no pude captar.” Yo le dije a mi padre, “¿Que dijo?” Él dijo, “Él ha dicho, todos ellos serán de Quraish.”[22]
Sin embargo, una investigación profunda demuestra que la versión exacta de la narración del Profeta es que “todos ellos serán de Bani Hashim”, lo que es exclusivo para los Imames de Ahlul Bayt.
¿Quiénes son los doce líderes?
El Profeta dijo:
“Ali y yo somos los padres de esta nación. Quienes nos reconozcan como tales creen en Al.lah, el Poderoso y Glorioso. Y de Ali son mis dos nietos, Hasan y Husain, cada uno de ellos es un príncipe sobre los jóvenes en el paraíso; y de entre los descendientes de Hussein habrá nueve. La obediencia a ellos es obedecerme y desobedecerlos es desobedecerme. El noveno de ellos es Al-Qa´im (el establecido firmemente) y Mahdi, el ejecutor y entrenado divinamente para la guía correcta.[23]
Le Dijo a su nieto Husain cuando solo tenía unos pocos años de edad:
“Tú eres un Sayyid y el hijo de un Sayyid. Tú eres un Imam y el hijo de un Imam, el hermano de un Imam y el padre de Imames. Tú eres evidencia y confirmación de Al.lah e hijo de su evidencia.
Tú eres padre de nueve de las pruebas de Al.lah en tú línea de descendientes. El noveno de ellos es el Qa’im.[24]
Fuente: Cuestionamientos acerca del Islam Shi’a
Editorial Elhame Shargh
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Fundación Cultural Oriente; www.islamoriente.com
[1] Sagrado Corán, 5:67. ver los siguientes comentadores (mufassirin): Tabari, Wahidi, Tha’alibi, Qurtubi, ar-Razi, Ibn Kathir, Naysaburi, Suyuti, y Alusi al-Baghdadi, y los siguientes historiadores: Baladhari, Ibn Qutaybah, Tabari, al-Khatib al-Baghdadi, Ibn Abd al-Birr, Shahristani, Ibn Asakir, Ibn al-Athir, Ibn Abi al-Hadid, Ya’qut al-Hamawi, IbnKhalaqan, Yafi’i, Ibn Kathir, Ibn Khuldun, al-Dhahabi, Ibn Hayar al-Askalani, Ibn al-Sabbagh al-Maliki, al-Maqrizi y Yalal ad-Din as-Suyuti, y tambien los siguientes registros de hadices: al-Shafi’i, Ahmad ibn Hanbal, Ibn Mayah, Tirmidhi, Nisa’i, al-Baghawi, al-Dulabi, ad-Tahawi, Abu Ya’la al-Musali, al-Hakim al-Naysaburi, Khatib al-Khawarizmi, Muhibb ad-Din at-Tabari, ad-Dhahabi, y al-Muttaqi al-Hindi.
[2] Ahmad ibn Hanbal, Musnad, Vol. 4, 281; al-Ghazzali, Sirr al-Alamin, 12; al-Tabari, ar-Riyadh an-Nadhirah, Vol. 2, 169
[3] Sagrado Corán, 5:3
[4] Sagrado Corán, 26:214
[5] Ihqaq al-Haqq, Vol. 4, 62; Tarikh at-Tabari, Vol. 2, 117; Musnad Ahmad ibn Hanbal, Vol. 1, 159; Tarikh Abul-Fida, Vol. 1, 116; Nadhm Durar as-Simtayn, 82; Kifayat at-Talib, 205; Tarikh Madina Dimishq, Vol. 1, Hadith 87, 139 y 143; al-Hasakani, Shawahid at-Tanzil, Vol. 1, 420; Muhammad ibn Yarir at-Tabari, Jami’ al-Bayan, Vol. 19, 131; Yalal ad-Din as-Suyuti, ad-Durr al-Manthur, Vol. 5, 97; Tafsir ibn Kathir, Vol. 3, 350; al-Baghdadi, Tafsir al-Khazin, Vol. 3, 371; al-Alusi al-Baghdadi, Ruh al-Ma΄ani, Vol. 19, 122; at-Tantawi, Tafsir al-Yawahir, Vol. 13, 103; al-Hakim an-Nisaburi, al-Mustadrak ‘ala al-Sahihayn, Vol. 3, 135. Otras fuentes históricas, tal como Sirat al-Halabi, dice que el Profeta agregó, “Y él será mi ministro (wazir) y mi heredero (warith).”
[6] Sagrado Corán, 5:55
[7] Zamakhshari, Tafsir al-Kash.shaf (ver interpretación del cap. 5, Vol. 55)
[8] Wahidi, Asbab an-Nuzul, (ver interpretación del cap. 5, Vol. 55
[9] Sagrado Corán, 5:38
[10] Vol. 6, Hadith 391 y 5991
[11] Sagrado Corán, 4:59
[12] Saludo de paz.
[13] Ṣaḥīḥ al-Bukhari, “Libro sobre las características más sobresalientes”, Hadith 3430, “Batallas”, Hadith 4064; Ṣaḥīḥ Muslim, “Libro de los méritos de los compañeros”, Hadith 4418; at-Tirmidhi, “Libro sobre las características más sobresalientes”, Hadith 3664; Ibn Mayah, “Libro sobre la introducción”, 112 y 118; Musnad Ahmad ibn Hanbal, Vol. 1, 173, 175, 177, 179, 182, 184, y 185.
[14] Al-Hakim, al-Mustadrak, Vol. 3, 128; al-Muttaqi al-Hindi, Kanz al-Ummal, Vol. 6, 155
[15] Musnad Ahmad ibn Hanbal, Vol. 5, 25; Ṣaḥīḥ Tirmidhi, Vol. 5, 296
[16] Kanz al-Ummal, al-Muttaqi al-Hindi, Vol. 6, 170
[17] Al-Hakim al-Mustadrak, Vol. 3, 226; Ibn Yarir, Kanz al-Ummal; al-Muttaqi al-Hindi, Vol. 15, 13; Tarikh ibn Kathir, Vol. 7, 358
[18] Sunan ibn Mayah, Vol. 1, 44; Ṣaḥīḥ Tirmidhi, Vol. 5, 300
[19] Al-Hakim, Vol. 3, 221, al-Dhahabi
[20] Ṣaḥīḥ al-Bukhari, “Libro del yihad y la marcha” Hadith 2724 and 2753, “Batallas” Hadith 3888; Ṣaḥīḥ Muslim, “Libro sobre los méritos de los compañeros” Hadith 4423-4424; Musnad Ahmad ibn Hanbal, Vol. 5, 333
[21] Ṣaḥīḥ al-Bukhari, “Libro de los rasgos más sobresalientes”, Hadith 3240; Ṣaḥīḥ Muslim, Kitāb al-Imarah, Hadith 3392; Musnad Ahmad ibn Hanbal, Cap. 2, 29, 93 y 128
[22] Ṣaḥīḥ al-Bukhari, “Libro sobre juicios legales”, Hadith 6682; Ṣaḥīḥ Muslim, Kitāb al-Imarah, Hadith 3393; at-Tirmidhi, “Libro sobre los juicios”, Hadith 2149; Abu Dawud, “Libro sobre al-Mahdi”, Hadith 3731; Musnad Ahmad ibn Hanbal, Vol. 5, 87, 90, 92, 95, 97, 99-101, y 106-108
[23] Ikmal ad-Din
[24] ibíd.