وَ قَالَ علی (علیه السلام): لَا قُرْبَةَ بِالنَّوَافِلِ، إِذَا أَضَرَّتْ بِالْفَرَائِضِ
Explicación
Las oraciones discrecionales no pueden brindarte la Alegría de Dios, cuando las oraciones diarias obligatorias son desatendidas.
Etimología
an-nawāfil (النَّوافِل): plural de nāfila (نافلة): discrecionales, acciones recomendadas, voluntarias. Nawāfil es lo que haces que no es obligatorio ni imperativo para ti.al-farāʔiḍ (فَرَائِض): plural de farīḍa (فَرِيضَة): deber, obligación, asignación, los obligatorios.
Explicación de los sabios:
“El Imam dijo: “Al hacer lo que se recomienda mientras se perjudican los deberes obligatorios, no se acerca a la verdad.” (Anṣāriān).Tema: El lugar de lo obligatorio y lo recomendado (devocional, espiritual): El Imam, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, dijo: “Una acción recomendada no acerca a una persona a Dios si daña la obligatoria” (Dashtī)[Y él dijo:] Si lo recomendado perjudica lo obligatorio, no debe acercar al siervo a Dios. (Shahīdī).El Imam (la paz sea con él) dijo: “No es permisible acercarse a la misericordia de Dios con cosas recomendadas si eso daña los deberes obligatorios (porque quien no cumpla con sus deberes será castigado, y quien desobedezca no se acercará a Dios, porque acercarse a Dios es contrario a la desobediencia).” (Faīḍ al-islam).Imam (la paz sea con él) dijo: “Cada vez que las acciones recomendadas dañan los deberes obligatorios, no los acercan a Dios.” (A. Makārem Shīrāzī).
Explicación ampliada
[Ḥabībullāh Khūī, “Minhāǧ al-barāʿa, Šarḥ Nahj al-Balāghah” 21, p.76]
“لَا قُرْبَةَ بِالنَّوَافِلِ، إِذَا أَضَرَّتْ بِالْفَرَائِضِ”
El significado:
El comentarista Al-Mu’tazili dijo: Si se toma como es, entonces muchos juristas se han adherido a esta doctrina, y esta es la doctrina imamita, la cual dice que no está permitido realizar las acciones recomendadas (nawāfil) si no se cumple con las acciones obligatorias (farāʔiḍ), ni durante la oración ni en ningún otro momento. El Hajj está contemplado.
Yo digo: La atribución de la inadmisibilidad de realizar oraciones voluntarias (nawāfil) para alguien que ha faltado a las de obligatoriedad (farāʔiḍ) es un de cual el erudito al-Majlisi, que Dios tenga misericordia de él, en su comentario sobre las ramas de al-Kafi en el capítulo sobre oraciones voluntarias en el momento de la oración obligatoria, explica en el primer hadiz de este capítulo: Los compañeros no estuvieron de acuerdo con respecto a la permisibilidad de realizar oraciones voluntarias o discrecionales para aquellos que tienen el deber de realizar la oración obligatoria y la han incumplido. Sobre esto Ibn Babawayh e Ibn al-Junaid dieron su opinión.
Lo que se puede decir es que sus palabras, la paz sea con él, indican la negación de acercamiento y recompensa divina en oraciones voluntarias si perjudican las oraciones obligatorias, no a su inhabilidad o invalidez, y hay una diferencia aparente entre ellas. El punto no es que realizar las oraciones voluntarias se haya convertido en una razón completa para contraponerse a las oraciones obligatorias, sino que, si se realizan las oraciones voluntarias y se abandonan las oraciones obligatorias no habrá cercanía en Dios. La preparación para la oración obligatoria es más importante, y mantener su perfección es necesaria. Quien se ocupa por la noche recitando el Corán y en oraciones voluntarias, y se agota hasta quedarse dormido y se pierde la oración obligatoria de la mañana, no habrá recompensa por sus oraciones voluntarias.
“Los discrecionales o nawāfil no deben obrar en la cercanía si son causa de deficiencia en los obligatorios o farāʔiḍ.”
[Ibn Abī al-Ḥadīd, “Šarḥ Nahj al-Balāghah”]
“لَا قُرْبَةَ بِالنَّوَافِلِ، إِذَا أَضَرَّتْ بِالْفَرَائِضِ”
El Imam (P) dijo: “No hay cercanía con las oraciones discrecionales (nawāfil) si se dañan los deberes obligatorios”:
Dañar los deberes obligatorios es lo mismo que la deficiencia en algunos de sus pilares y condiciones, a veces una persona comete tal pérdida debido a la fatiga del trabajo recomendado o por hacerlo en el futuro. En aquello que provoca el abandono obligatorio, no tiene sentido estar cerca de la misericordia de Dios, porque provoca desobediencia y castigo, y es contrario a la cercanía a lo divino.
[Ibn Maytham al- Baḥrānī, “Šarḥ Nahyul-Balāghah”]
«لَا قُرْبَةَ بِالنَّوَافِلِ إِذَا أَضَرَّتْ بِالْفَرَائِضِ»
El daño a las obligaciones es la debilidad de algunos elementos y sus condiciones, en ocasiones una persona comete dicho daño por cansancio por el trabajo recomendado o por realizarlo en el futuro. En lo que provoca el abandono obligatorio no significa cercanía a la misericordia de Dios, porque provoca desobediencia y castigo, y va en contra de la cercanía divina.
[Ayatollah Makārem Shīrāzī, “Payām Imām Amīr Al-Mūminīn”]
Acciones recomendadas (nawāfil) sin valor:
El Imam (la paz sea con él) dice en este sabio dicho: “Las acciones recomendadas no nos acercan a Dios si dañan los deberes obligatorios”; (لَا قُرْبَةَ بِالنَّوَافِلِ، إِذَا أَضَرَّتْ بِالْفَرَائِضِ).(1)
La explicación más clara que parece haber para este sabio dicho del Imam (la paz sea con él) es que cada vez que las acciones recomendadas dañan los deberes obligatorios, su valor se elimina y su recompensa se reduce, como en el caso de una persona que está adorando desde el comienzo de la noche hasta después de la medianoche, pero se queda dormida y su oración matutina no es realizada. Se dice que lo mustahab que daña un acto obligatorio no tiene valor, como hacer buenas obras y ayudar a los necesitados, pero debe ser negligente en el pago de sus deudas o en la realización de la peregrinación obligatoria. La razón de esto es clara: se tienen deberes beneficiosos y obligaciones que si se abandonan causarán un daño grave a una persona, mientras que los actos recomendados no lo son, y es como abandonar la medicina principal de su dolor y centrarse en medicamentos adicionales e innecesarios.
En un hadiz que ha sido narrado por Amir al-Mu’minin (la paz sea con él) en Ġarral al-Hikam, leemos:
يَسْتَدَّلُ عَلى إدْبارِ الدُّوَلِ بِأرْبَع تَضييعِ الاُْصُولِ وَ التَمَسُّكِ بِالْفُرُوعِ وَتَقْديمِ الاْراذِلِ وَتَأخيرِ الاْفاضِلِ
“Hay cuatro cosas que conducen a la caída de los estados: la pérdida de principios, el aferramiento a las ramas, auxilio a los impíos y retrasar a los virtuosos.” (2)
Otra interpretación que es sabia para esta afirmación es que, en algunos actos de adoración, si uno abandona los deberes obligatorios y hace lo que se recomienda, lo recomendado es básicamente inválido. Por ejemplo, si una persona ayuna en Ramadán, este es un acto obligatorio, si ayuna en otro contexto, es un acto recomendado, no obligatorio. Si alguien abandona la peregrinación obligatoria y va a la peregrinación recomendada, lo cual no es obligatoria, según la opinión colectiva, su peregrinación recomendada será inválida.
La tercera posibilidad en la interpretación de esta afirmación es que la referencia a la cuestión de los opuestos se menciona en la ciencia de uṣūl, porque algunas personas creen que mandar algo prohíbe su contrario específico, y basándose en esto, creen que, si una persona que tiene una deuda inmediata, y ora durante el tiempo prolongado, su oración o ṣalāh no será válida.(3) Esto es debido a que realizar la oración durante mucho tiempo ha perjudicado la obligación inmediata, y como la orden prohíbe lo contrario, esta oración no se puede realizar y es inválida. Pero recientemente los investigadores no han aceptado este asunto y no consideran el mandato de algo como una razón para prohibir una antítesis específica. Por supuesto, no existe prohibición entre todas estas interpretaciones. De igual modo, la primera interpretación es la más apropiada.
Notas:
1- Este discurso sabio ha sido mencionado por el autor de Maṣādar Nahyul-Balāghah, el que vivió después de Sayyid Razi, que citó esta sabiduría en su libro Ġarral al-Hikam de la siguiente manera: “Cuando el nawāfil dañe las oraciones obligatorias, entonces déjalas ir (a las nawāfil)”. Esta diferencia muestra que Amadī lo obtuvo de otra fuente. (Maṣādar Nahj al-Balāghah, vol. 4, p. 37). Sin embargo, parece que el erudito Jatib, el autor de las fuentes, ha pasado por alto el hecho de que en las palabras del aforismo de Nahj al-Balāghah, la palabra 279 es la misma que esta frase que la de Amadī. En el libro de Tamām Nahyul-Balāghah, estas dos frases se mencionan con otros añadidos, todas las cuales están relacionadas con el mismo contenido y contenido, además del testamento que ha dado a sus compañeros en el campo de la enseñanza de las costumbres de la religión y del mundo. Sus frases son las siguientes: “Si las oraciones voluntarias dañan las oraciones obligatorias, entonces recházalas no realizando las oraciones voluntarias en el momento de las oraciones obligatorias, sino comienza con las oraciones obligatorias y luego reza lo que te convenga. No hay cercanía con las oraciones voluntarias que perjudican a las obligatorias. Un hombre no debe realizar una oración voluntaria en el momento de una oración obligatoria, ni debe abandonarla excepto con una excusa: Él la compensará después si puede hacerlo, ya que Dios Todopoderoso dice: (Aquellos que son constantes en sus oraciones) es decir, aquellos que compensan lo que se perdieron de la noche con el día y lo que se perdieron del día Él extendió de noche…” (Tamām Nahyul-Balāghah, p. 728).
إِذَا أَضَرَّتِ النَّوَافِلُ بِالْفَرَائِضِ فَارْفُضُوهَا لاَ تَقْضُوا النّافِلَةَ فی وَقْتِ الْفَریضَةِ لکِنِ ابْدَؤُوا بِالْفَریضَةِ ثُمَّ صَلُّوا مَا بَدَا لَکُمْ فَإِنَّهُ لاَ قُرْبَةَ بِالنَّوَافِلِ إِذَا أَضَرَّتْ بِالْفَرَائِضِ وَلاَ یُصَلِّی الرَّجُلُ نَافِلَةً فی وَقْتِ فَریضَة، وَلاَ یَتْرُکُهَا إِلّا مِنْ عُذْر، وَلکِنْ یَقْضی بَعْدَ ذَلِکَ إِذَا أَمْکَنَهُ الْقَضَاءَ فَإِنَّ اللّهَ ـ عَزَّ وَجَلَّ ـ یَقُولُ: (الَّذِینَ هُمْ عَلى صَلاتِهِمْ دائِمُونَ) یَعْنِی الَّذینَ یَقْضُونَ مَا فَاتَهُمْ مِنَ اللَّیْلِ بِالنَّهَارِ وَمَا فَاتَهُمْ مِنَ النَّهَارِ بِاللَّیْلِ
Otros libros incluidos son Amadī en Ġarral al-Hikam en Harf Mim, Rashid al-Din Watawat en Gharar wa al-Arar (Maṣādar Nahj al-Balāghah, vol. 4, p. 32).
2- Ġarral al-Hikam, hadiz 7835.
3- El ṣalāh es la oración de los musulmanes, la cual se caracteriza por sucesivos ciclos de levantarse, arrodillarse y postrarse. Comúnmente se llama así a las cinco oraciones diarias obligatorias del islam, uno de los cinco pilares. Como tal, el rezo ritual es obligatorio (farḍ) para todo musulmán. Realizar el ṣalāh es la mayor obligación, luego de la profesión de fe. El ṣalāh debe ser realizado en lengua árabe, dentro de las habilidades del orador (aunque la aduá posterior no necesariamente debe serlo), y debe ser recitado de memoria, aunque los principiantes pueden usar ayuda escrita. Todos los ciclos del ṣalāh deben hacerse dentro de su tiempo predeterminado con el apropiado número de series de movimientos. Mientras que pueden ser orados en cualquier punto dentro del tiempo predeterminado, pero nunca antes, se considera mejor hacerlo al principio del período, cuando la llamada a la oración anuncia el comienzo. Cuando se está muy alejado de una mezquita para oír la llamada, se puede determinar el tiempo por la posición del sol en el cielo.
Ṣalāh es una palabra árabe cuyo significado básico es «una reverencia, homenaje, la adoración, la oración, el rezo». En su uso español, la referencia de la palabra casi siempre se limita al culto islámico formal, obligatoria se describe en este artículo. Traducir ṣalāh como «la oración» no se suele considerar lo suficientemente preciso, ya que «la oración» puede indicar varias formas diferentes de relacionarse con Dios; la oración personal o súplica se llama aduá (del árabe, دُعَاء duʿāʾ; literalmente ‘invocación’) en el uso islámico. Asimismo, los musulmanes usan varios términos para referirse al ṣalāh en función de su lengua o cultura. En muchas partes del mundo, incluidos muchos países no árabes como Indonesia, el término árabe ṣalāh se utiliza.
El ṣalāh es uno de los actos más importantes de la religión islámica. Si éste es aceptado por Dios, todos los restantes actos del creyente le serán aceptados. El musulmán debe tener la precaución de no orar apresuradamente, de recordar a Dios con humildad y sinceridad, de estar consciente de a quién se está dirigiendo y de considerarse muy pequeño ante la majestuosidad y grandeza del creador del universo. Durante el ṣalāh el musulmán debe arrepentirse de sus pecados, pedir perdón por ellos, debe alejarse de todos aquellos actos y pensamientos que constituyen un obstáculo entre el siervo y su creador. Unos Hadices acerca del Salat:
Dijo Imam Ali (P): «Si la persona que se encuentra rezando supiera la misericordia que le está cubriendo, no levantaría su cabeza de la prosternación.»
Dijo Imam Al-Baqir (P): «Lo primero que se le computa al siervo es la oración, y si la misma es aceptada, todo lo demás le será aceptado (y si no es así el resto de sus acciones no le ocasionarán beneficio alguno).»
Dijo Mensajero de Dios (PB): «Observad las oraciones, que por cierto que Dios, Exaltado y Engrandecido Sea, cuando acontezca el día de la Resurrección requerirá al siervo, y lo primero que le preguntará es respecto a la oración, y si las presenta completas (será bienaventurado), y si no es así, será arrojado al fuego.»
Los ṣalāh obligatorios
El islam manda los siguientes ṣalāh:
El ṣalāh cotidiano.
El ṣalāh del fallecido.
El ṣalāh de los fenómenos naturales. La oración es obligatoria en tres casos:
a) Por un eclipse de sol.b) Por un eclipse de luna.c) Por un terremoto, aunque sea leve y nadie tema por él. Y también, según precaución meritoria, en caso de que haya truenos, rayos, relámpagos, vientos huracanados, etc. que produzcan temor general en la población o que provoquen temor entre la mayoría de las gentes.
El ṣalāh de vueltas rituales en torno a la Kaaba en la Peregrinación.
Los ciclos de ṣalāh que no hizo el padre en pago son obligatorias para el hijo mayor. Si el padre no ha realizado sus oraciones, habiendo podido recuperarlas en vida, será obligación del hijo mayor recuperarlas, siempre y cuando el difunto no las haya omitido por desobediencia (a la orden de Dios), según precaución obligatoria, o bien podrá el hijo contratar a una persona para que las realice. Si las oraciones no realizadas perteneciesen a la madre, no será necesaria su compensación por parte del hijo mayor, aunque es preferible hacerlo.
El ṣalāh por la promesa.