Desde su púlpito de la Mezquita Imam Rida, en el barrio de Bir al Abd (en el suburbio del sur de Beirut), los sermones de Sayyed Fadlallah dieron forma a las tendencias actuales dentro de la corriente shií de musulmanes libaneses desde los años ochenta hasta los últimos días de su vida.
La invasión de Líbano en junio de 1982 marcó un punto de inflexión para los libaneses, especialmente para los shiíes que vivían en el Sur, y para la carrera de Sayyed Fadlallah. El inicio de Hezbollah como un movimiento de resistencia a la ocupación se remonta a aquella invasión israelí.
Él apoyó los ideales de la Revolución Islámica de Irán y la creación del movimiento islámico en Líbano. En sus sermones, él abogaba por la resistencia armada contra la ocupación israelí en Líbano, Cisjordania y Gaza y mostraba también su rechazo al Estado de Israel. Él manifestó en una ocasión que el eslogan “tierra por paz” era una traición a la sangre palestina y a la sagrada causa de Palestina.”
“Israel supone un gran peligro para nuestras futuras generaciones y para el destino de nuestra moderna nación, dado que promueve una ideología expansionista y dirigida a ampliar sus asentamientos, que ha comenzado ya a aplicar en la Palestina ocupada y que busca crear el Gran Israel, desde el Eúfrates al Nilo,” dijo Sayyed Fadlallah en una de sus conferencias.
Sayyed Fadlallah a menudo explicaba que el Judaísmo, el Cristianismo y el Islam eran religiones divinas. Sin embargo, él siempre diferenció a un judío que residiera en cualquier parte del mundo de otro judío sionista que se asentara en Palestina para tomar parte en la ocupación de esta tierra árabe.
“Toda Palestina es una zona de guerra y cada judío que ocupa de forma ilegal una casa o un terreno que pertenece a un palestino (expulsado) es un objetivo legítimo. No hay judíos inocentes en Palestina. Ellos matan a nuestras mujeres, niños y ancianos. Destruyen nuestras casas. Confiscan nuestra agua y nuestra libertad.”
En una entrevista con Al Manar TV el 21 de marzo de 2008, Sayyed Fadlallah declaró:
“El estado hebreo se está preparando para celebrar el 60 aniversario -60 años desde que iniciara su saqueo de Palestina- con un festival al que asistirán dignatarios de varios países del mundo, la mayor parte de los cuales apoya al estado sionista y considera al movimiento de resistencia como terrorista. Esto es lo que llevó a la canciller alemana Angela Merkel a visitar ese estado saqueador, que continúa extorsionando a Alemania utilizando la excusa del pasado nazi del país y el Holocausto. El sionismo ha inflado el número de las víctimas de ese holocausto más allá de cualquier imaginación.”
BOICOTEAR LOS PRODUCTOS ESTADOUNIDENSES E ISRAELÍES
Existen también otras formas de resistencia diferentes a la lucha armada. El boicot es un arma fundamental en contra de los opresores para presionarles económicamente. Sayyed Fadlallah jugó un papel muy relevante en este tema al emitir una fatua sobre la obligación de boicotear los productos estadounidenses e israelíes.
“Todos los productos y bienes de EEUU e Israel deben ser boicoteados de una forma tal que dañe los intereses norteamericanos y los israelíes y que actúe como una forma de disuasión en su guerra contra el Islam, que está siendo llevada a cabo bajo el pretexto de la lucha contra el terrorismo. Este boicot debe convertirse en una tendencia abrumadora que haga que EEUU e Israel sientan que sus economías están bajo un peligro presente y real.”
Él veía también a la Administración estadounidense como “un estado arrogante que apoya a la entidad sionista.”
“No he encontrado en toda la historia del conflicto árabe-israelí ni siquiera una posición norteamericana neutral. EEUU está siguiendo ahora una política peor que la de los colonialistas británicos y franceses,” señaló.
Sayyed Fadlallah fue un firme partidario del sistema islámico de Irán y su lucha contra la hegemonía global. Él declaró en una ocasión que Irán estaba solo con el pueblo palestino y apoyando su lucha.
Para mostrar su apoyo al programa nuclear civil de Irán, él se preguntó por qué la Administración Bush y sus aliados occidentales permanecían callados con respecto a la posesión de un arsenal de armas de destrucción masiva por parte de Israel. “¿Tiene sentido la posesión de armas nucleares por parte del régimen sionista, hecho éste que supone una potencial amenaza a la región?”, se preguntó.
En su último encuentro con el secretario general de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasrallah, Sayyed Fadlallah hizo un llamamiento en favor de la unidad entre los libaneses para hacer frente a la guerra psicológica lanzada por Israel y llamó a intensificar los preparativos a todos los niveles para impedir que el enemigo consiguiera ganancias políticas. El Gran Ayatollah abogó también en favor de la unidad nacional para hacer fracasar los intentos israelíes dirigidos a ampliar el foso entre los libaneses.
“Ayatollah Mohammad Hussein Fadlullah”
Este nombre será recordado para siempre como el clérigo shií más importante que ha surgido en Líbano y será reverenciado en todo el mundo. Su influencia teológica y política ha sido profunda y considerable y no se limita sólo a la escuela shií, sino también a los musulmanes y cristianos en su conjunto.
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