Discurso primero: CÓMO DESPOJARNOS DE LA NATURALEZA EGOÍSTA QUE NOS APRISIONA
Capítulo I
Una de las fórmulas de cortesía del corazón en los actos de adoración y uno de los deberes internos del viajero espiritual a lo largo del camino hacia la otra vida, es «la atención hacia la majestuosidad del Señorío Divino (rubûbiiah) y la humilde condición del adorador». Esta es una de las más importantes estaciones para el sâlik (viajero). La fuerza en la Vía de todo viajero es proporcional a la atención que presta a este asunto o, mejor dicho, la plenitud de la condición humana de la persona está en relación con la perfección de esa atención.Cuanto más esté uno aplastado por el egoísmo, el orgullo y la vanidad, más alejado se encontrará de la perfección humana y de la Estación de Cercanía al Señorío Divino. El velo de la vanidad y el orgullo es más denso y más oscuro que todos los otros velos. Arrancar ese velo es más difícil que arrancar todos los otros velos y arrancarlo es un paso preparatorio para arrancar otros velos. De hecho, arrancar este velo es la llave maestra de lo Oculto y de lo Manifiesto, y la gran puerta de acceso a la perfección espiritual.Mientras el hombre tenga sus ojos puestos en sí mismo, en su belleza y perfección imaginada, estará velado y descartado de la belleza absoluta y la perfección pura. La primera condición para viajar hacia Allah es abandonar esa casa. Este es el criterio para la lucha entre la Verdad y la falsedad.. Así, el viajero que hace el viaje dando pasos de egoísmo y vanidad, y está envuelto en los velos del orgullo, sufrirá en vano y su viaje no será hacia Allah sino más bien hacia sí mismo: «La madre de los ídolos es el ídolo de ti mismo» (Rumi).Allah Todopoderoso, dice:
«Quien emigre por Allah, encontrará en la tierra mucho refugio y espacio. La recompensa de aquel a quien sorprenda la muerte, después de dejar su casa para emigrar a Allah y a Su enviado, incumbe a Allah. Allah es indulgente, misericordioso. (Corán, 4:100)
La emigración formal, o la forma de la emigración, es la emigración corpórea desde la casa formal a la Ka’bah o a los sepulcros de los hombres santos (auliya) (P), pero la emigración espiritual es salir de la casa del alma y la casa de este mundo hacia Allah y Su Mensajero. Emigrar hacia el Mensajero y el wali es también una emigración hacia Allah. Mientras el alma tiene una inclinación hacia uno mismo y el orgullo, no se está viajando. Y mientras haya residuos del Yo en los ojos del viajero, y mientras las paredes de su propia ciudad del ego estén levantadas y la llamada del amor al ego no haya desaparecido todavía, él permanece inmóvil y no es un viajero o un emigrante.Está recogido en Misbah ush- shari’ah que el Imam as-Sadiq (a.s.) dijo: «La adoración es una gema cuyo corazón es el Señorío Divino (rububiyat). Todo lo que se pierde en la adoración es encontrado en el Señorío Divino y todo lo que es ocultado del Señorío Divino es obtenido en la adoración».Aquel que viaje a los pies de la adoración y queme su frente con la marca de la humildad de la adoración, alcanzará la Gloria del Señorío Divino. La conexión con las verdades del Señorío Divino reside en viajar siguiendo los grados de la adoración, y lo que carece de egoísmo nos sitúa bajo la sombra protectora del Señorío, hasta alcanzar ese estado en el cual, la Verdad Altísima es el oído, la vista, las manos y los pies, como está recogido en el bien conocido Hadiz verdadero y aceptado por las dos Escuelas.Hadiz Qudsi... Y ciertamente el siervo se acerca a Mí mediante sus actos de adoración no obligatorios, hasta que Yo lo amo y cuando lo amo Yo soy los oídos con los cuales oye y la vista con la cual ve y la lengua con la cual habla y la mano con la cual ase; si Me invoca le respondo y si Me pide le doy»Usul ul-Kafi, tomo IV, pag. 53Cuando el viajero abandone su conducta (tasarrufat) y someta completamente el reino de su existencia a la Verdad Altísima, abandonando todos los asuntos de la casa al Dueño de la misma, aniquilándose en la Gloria del Señorío Divino, el Dueño de la casa dirigirá Él mismo los asuntos. Así la conducta del viajero espiritual se convertirá en divina y sus ojos serán divinos y verá con los ojos de la Verdad, sus oídos serán divinos y él podrá oír con los oídos de la Verdad. Y lo contrario también es cierto, cuanto más completo sea el señorío del ego y más apreciada sea su gloria, menor será, en la misma proporción, la Gloria del Señorío Divino, en esa misma proporción pues ambos son contradictorios: «Este mundo y el próximo son como dos esposas enfrentadas».Nahyul Balagha, Dichos breves nº 103«La Dunia y el Ajira son dos enemigos enfrentados y dos caminos que difieren, así que quien ama la Dunia odia la otra vida y es enemigo de ella y ambas son como el Este y el Oeste y el caminar entre ellos, todo lo que te acerca a uno te aleja del otro y ambas son como las dos esposas enfrentadas de un hombre».Así, el viajero hacia Allah tiene que reconocer obligatoriamente su posición de humildad y colocar la humildad de la adoración y la Gloria del Señorío ante sus ojos. Cuanto más fuerte sea este criterio, más espiritual será su adoración, hasta que, con la ayuda de la Verdad Altísima y de los hombres santos (P), alcance la verdad de la adoración y su núcleo, y podrá tener un destello del secreto de la adoración.En todas las formas de adoración, especialmente en el salat (oración) la cual tiene una posición de comprensibilidad globalizadora (yami’iyat), y posee, entre las formas de adoración, la posición del Hombre Perfecto, y la del Nombre Más Grande (Allah), o incluso es el Nombre Grande mismo, estas dos posiciones - es decir, la posición de la Gloria del Señorío Divino, que es la Verdad y la posición de la humildad de la adoración, que es la sirvienta de esta Verdad y su atributo- están ocultas.Entre los actos recomendados, el QUNUT, y entre los actos obligatorios el SUYUD, tienen particularidades especiales a las que nos referiremos más tarde insha’allah.Debe ser observado, sin embargo, que la adoración absoluta está en los más altos grados de perfección y en las más grandiosas posiciones de humanidad, en la que nadie tiene ninguna participación excepto la más perfecta de las criaturas de Allah, Muhammad (BP), en la cima, seguido por los walis perfectos. En el resto de la gente los pasos de su adoración son incompletos y sus actos de adoración y humildad son producto de otras causas.Solamente a través de la adoración uno puede disfrutar el verdadero viaje celestial pleno (mi’raj). Así vemos que la adoración y la atracción del Señorío Divino es la que llevó a esta santa persona hacia el viaje celestial (mi’raj), a la cercanía divina y a la unión con Él. Y por eso la noble aleya dice:
«Gloria a quien hizo viajar a Su siervo por la noche desde la Mezquita Sagrada a la Mezquita lejana...» (17:11)
Y también por ello, hay un énfasis sobre la adoración antes que sobre la Profecía en el tashahud (testimonio de fe) de la oración, el cual representa un retorno de la aniquilación completa alcanzada en el suyud. Y por ello también hay en eso una indicación de la estación de la Profecía como fruto resultante de la adoración. Y sobre este punto existe un largo debate que está fuera de los objetivos de estas páginas.
Capítulo IILAS ETAPAS SUCESIVAS DE LA GENTE de la BÚSQUEDA ESPIRITUAL (Ahl us-sulûk): Conocimiento, fe , tranquilidad y visión
Sabe que, en esta etapa y en el resto de las etapas, la gente buscadora se encuentra con innumerables niveles y grados y nos ocuparemos de algunos de estos grados, de manera general.Porque el conocimiento de todos sus aspectos y el recuento de todas las etapas, está más allá de la capacidad de este humilde servidor: "LOS CAMINOS QUE LLEVAN A DIOS SON TAN NUMEROSOS COMO LAS RESPIRACIONES DE SUS CRIATURAS"Una de esas etapas es la etapa de la sabiduría (‘ilm), que consiste en establecer mediante el camino del conocimiento científico y de la argumentación lógica "La nimiedad de la adoración y la Grandeza del Señorío Divino".Es un punto crucial de las enseñanzas, claramente expuesto en las ciencias superiores y en la filosofía (Al-Hikma al-Muta’aliah), que el conjunto de las certezas y todo el ciclo de la existencia son pura apariencia y apega y nada más que miseria y carencia. El poder y el Reino y la Soberanía, pertenecen en exclusiva a la Esencia Santificada de la Grandeza.Nadie puede compartir Su Majestad y Grandeza. La insignificancia de la adoración y la carencia de todo están gravadas en la frente de todas las criaturas y en su esencia más íntima.La verdad de la gnosis y de la visión y el resultado del esfuerzo y de la búsqueda, consisten en eliminar el velo que cubre el rostro de la realidad y mostrar la insignificancia de la adoración y la base de nuestra carencia e insignificancia esenciales; de uno mismo y de todas las criaturas.La súplica atribuida al señor de todas las criaturas, las bendiciones y la paz sean con él y con su familia purificada, : ¡Oh, Dios! Muéstrame las cosas como son! (Al lahum ma, arinil ashi’a kama hia), puede que se refiera a esta misma etapa del camino espiritual. Es decir, expresa el deseo de contemplar la insignificancia de la adoración, condición necesaria para poder contemplar la Grandeza del Señorío Divino. Así pues, si el buscador en el camino de la Verdad, el viajero en la senda de la adoración, alcanza esta etapa por el camino de la ciencia y del progreso intelectual, , caerá entre los velos del conocimiento y alcanzará la primera etapa de la condición humana, pero este velo es uno de los velos más densos, del cual ha sido dicho: "El conocimiento es el mayor de los velos" (Al ‘ilmu hual hiyâb al-akbar).El buscador no debe permanecer atrapado en este velo, al contrario, debe desgarrarlo.Si se complace en esta etapa y su corazón se queda enganchado en esta trampa, caerá en Istidrach.Istidrach en esta etapa, significa ocuparse en exceso de las múltiples ramificaciones de las ciencias, manejando argumentos abundantes para demostrar las tesis, imposibilitándose con ello para llegar a las siguientes etapas y permitir que el corazón se quede enganchado en ella, distrayéndose del objetivo deseado, que es la aniquilación en Allah (fana fil lah) y malgastando su vida en el velo de la argumentación lógica y sus ramificaciones.Y cuanto más sean esas ramificaciones, mayores serán el velo y el alejamiento de la Verdad.Así pues, el buscador no debe caer en esta etapa en la trampa demoníaca, ni quedar velado de la Verdad y de la realidad, por culpa de la mucha erudición y el poder de la argumentación y regresará con seriedad a la búsqueda del verdadero asunto, llevándose a sí mismo al otra etapa, que es la etapa segunda.La segunda etapa consiste en escribir con la pluma del intelecto en la página del corazón, aquello que el intelecto descubrió mediante el poder de la argumentación y del camino científico, permitiendo que la verdad contenida en el enunciado: "La insignificancia de la adoración y la Grandeza del Señorio Divino" llegue a él y escapando de los velos y las cadenas de la erudición.Así que, el resultado de la segunda etapa es la adquisición de fe en la realidad.Nos ocuparemos pronto de esta etapa, si Dios quiere.La tercera etapa es la ce "Certeza y tranquilidad del Alma" que es, en realidad, el grado perfecto de la fe.Dijo Dios Altísimo, dirigiéndose a Su amigo (Abraham): ¿Acaso no crees? Dijo (Abraham) Sí, pero es para que mi corazón adquiera certeza y tranquilidad. (A wa lam tu’min? Qâla: balâ wa lakin li iatmain na qalbî. 2:260Quizás volvamos a hablar de esta etapa más adelante.La cuarta etapa es la de la Visión (Mushâhadah), que consiste en una luz divina y en una manifestación del Misericordioso en la cual, al buscador le son monstradas en la intimidad la manifestación continua de los nombres y de los atributos y su corazón se ilumina de los pies a la cabeza con la luz de la visión.En esta etapa, existen muchos grados, que exceden la capacidad de estas páginas.En esta etapa se produce una muestra de acercamiento a las palabras contenidas en el hadiz llamado Qurba Nawafil: "hasta que yo soy su oído y su vista y su mano" y en ella, el buscador ve como se sumerge en un océano sin fin, más allá del cual hay otro océano más profundo, dentro del cual son desvelados parcialmente los secretos del "Destino" (Qadr).Cada una de estas etapas posee su propio Istidrach (quedarse colgado de otra cosa distinta de Dios)que supone para el buscador un gran peligro de quedarse colgado.Por eso mismo, éste deberá estar limpio de vanidad y ego en cada etapa y libre del orgullo y el egoísmo, que son el origen de la mayoría de los males, especialmente para el buscador.Más adelante nos ocuparemos de este tema, si Dios quiere. Capítulo IIIREALIDAD Y EFECTOS DE LA HUMILDADque es parte de la disciplina necesaria en todos los actos de adoración, especialmente en la oración. Acerca de la Humildad.-La humildad es uno de los elementos necesarios para el Salik (el buscador espiritual) en todos los actos de adoración, especialmente en la oración, que es la cima de todos ellos y que posee una posición que los abarca a todos. Y su realidad está compuesta de una completa sumisión mezclada con amor o temor. Y esto se produce al comprender o percibir la Grandeza, el Poder y la Majestad de la Hermosura y la Gloria. Y el beneficio de esta Hermosura es que los corazones de la gente del camino, según su naturaleza y disposición natural difieren:Un grupo de los corazones están enamorados de las manifestaciones de la belleza y debido a su naturaleza se sienten atraídos por la belleza del Amado.Y, cuando, en el camino, perciben la Sombra de la Hermosura o son testigos de la Fuente de la Belleza, la inmensidad escondida en el Secreto de la Belleza les sale al paso y pierden la conciencia de sí mismos. Igual que en toda hermosura existe una majestuosidad escondida en cada Majestuosidad hay una hermosura oculta. Puede que sea a esto a lo que se refiere Hadrat Maulá de los gnósticos y Emir de los Creyentes y los Caminantes, (as-Salekin) la paz sobre él y sobre su familia, cuando dice: «Glorificado sea Quien manifiesta Su Misericordia sobre Sus amigos en medio de la dureza de Su castigo y endurece Su castigo sobre sus enemigos en medio de la manifestación de Su Misericordia. (1)Así pues, la Majestad y el Poder de la Hermosura le envuelven y le hacen caer en un estado de humildad frente a la Belleza del Amado.Y este estado, al principio provoca temblor en el corazón y una agitación. Posteriormente, tras la aceptación da paso al estado de Cercanía y el estado de temor y agitación producidos por la Inmensidad y Poder se transforman en Cercanía y tranquilidad y deviene un estado de reposo y certeza, tal como era el estado del corazón del Amigo de Dios (Abraham) sobre él la Paz.Otro grupo de corazones están sobrecogidos ante la Manifestación de la Majestuosidad. Ellos perciben continuamente la Inmensidad, Grandeza y Hermosura y su humildad es producto de su temor y en sus corazones se manifiesta la realidad de los atributos de Poder y Majestad, tal como le sucedía al Profeta Iahia, sobre nuestro Profeta y su familia y sobre él sean la paz.Así pues, la humildad, a veces viene mezclada con amor y, a veces, viene mezclada con miedo y sobrecogimiento, aunque en todo amor hay sob