Agencia Noticiosa Ahlul-Bait (P)

Fuentes : irib
domingo

11 septiembre 2011

19:30:00
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Las Declaraciones del Líder Supremo en la Congregación de las Fuerzas Basiyíes

TEHERAN (ABNA) - El Ayatolá Jameneí, líder supremo de la revolución islámica de Irán explicitó que las fuerzas de la movilización popular Basiyí, nunca se rendirán ante las presiones de los enemigos.

Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA) - El Ayatolá Jameneí, hoy en la congregación de las fuerzas Basiyíes de Irán en unas declaraciones emitidas simultáneamente para millones de integrantes Basiyíes en todo el país, al aludir a las presiones políticas, económicas y militares de los enemigos en los últimos 28 años declaró que no reconciliar con el enemigo supone uno de los puntos comunes de la revolución islámica y los Basiyíes.

El líder supremo iraní enfatizó que la revolución y el Imam no se rindieron ante las presiones y los Basiyíes tampoco se doblegarán ante las presiones, reglas hostiles y polémicas, ni darán un paso atrás.

El comandante en jefe, consideró que la resistencia del pueblo frente a las presiones y su fidelidad a los ideales de la revolución islámica, entre ellos seguir alzando la bandera del Islam, fortalecen la nación islámica y demuestran la victoria de Irán ante los enemigos.

Añadió que el sistema islámico gracias a las características sobresalientes y comunes de la revolución y los Basiyíes ha conseguido avanzar en todos los terrenos y los enemigos tienen que reconocer su derrota frente al ánimo, la voluntad y la gloria de la nación iraní.

El Ayatolá Jameneí, refiriéndose a los movimientos de EE.UU. para celebrar la conferencia de Annapolis, fracasada de antemano, añadió que los norteamericanos intentan recompensar parte de las derrotas del régimen falso y usurpador sionista, pero la conciencia de la nación islámica especialmente los pueblos de Palestina e Irán impedirán la materialización de los nefastos objetivos del imperialismo.

El líder supremo de la revolución islámica de Irán también insistió en que las consignas, posturas y resistencia de la nación iraní influyen en los asuntos regionales y mundiales y esta realidad pone de manifiesto el avance creciente del país hacia los ideales y objetivos de la revolución islámica.

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