La justicia, libertad, amor hacia los otros, los valores humanos son temas, que siempre y durante toda la historia han sido respetados por todo el mundo. Entonces, las vanguardias de estas características divinas, en todas las etapas, gozan de gran popularidad entre la gente. Ellos son quienes siempre han luchado contra la ignorancia y opresión. Entre tanto, los Miembros de la Casa Profética iluminan como estrellas en el cielo y cada uno por su cuenta, de acuerdo a las condiciones de su época, han revelado las verdades de la religión para que hereden las futuras generaciones humanas un tesoro de sabiduría. Hoy estamos en el aniversario del nacimiento de uno de estos grandes hombres. Para nosotros es un gran honor que en el aniversario del nacimiento del Imán Reza (que Dios lo tenga en su gloria) estemos a su servicio de ustedes queridos oyentes, aprovechando de la misma oportunidad le felicitamos este día y le invitamos a acompañarnos para conocer más la vida del Imán Reza. Hoy los seguidores de los Miembros de la Casa profética están felices, y el mausoleo del Imán Reza, ubicado en la ciudad de Mashhad ha ganado otra atmósfera, el cual está atiborrado de gente que entusiasmadamente ha ido a peregrinar a este lugar sagrado. Los hombres y las mujeres, los viejos y los jóvenes, incluso los menores, peregrinan respetuosamente en el mausoleo del Imán Reza. A esta multitudinaria presencia de gente le viene a la memoria este hadiz pronunciado por el profeta del Islam. "Uno de mis descendiente será enterrado en la provincia de Jorasan. Cualquier persona afligida peregrinará en su mausoleo, Dios Altísimo eliminará su estado triste y cualquier pecador que peregrine, Dios le perdonará sus pecados." Entre esta multitud de creyentes, Andre Simuninan tiene una sensación extraña en su corazón. Él todos los años viaja para peregrinar al mausoleo del Imán Reza, y cada vez recuerda un episodio inolvidable. Un día inmemorial se liberó de un dolor, que sufría desde hace mucho tiempo. Andre en un choque había perdido a sus padres y debido a este terrible suceso quedó mudo. Los esfuerzos de los médicos por su recuperación resultaron ineficaces y con desesperación acudió a un medico que había escuchado que cura a los enfermos que sufren dolores incurables. A pesar de que él era cristiano, pero con un corazón atormentado se fue a Mashad para peregrinar al mausoleo del Imam Reza, en aquel lugar sagrado pidió a Dios que le curara la enfermedad. Andre dice: "En aquel día cuando miré el mausoleo del Imam Reza, de repente, me llené de una rara sensación. Acompañé a la multitud de peregrinos. Como si me hubiera llenado de necesidad intente pronunciar mi dolor, pero debido a que era mudo y no podía hablar, tenía un nudo en la garganta y, entre lagrimas, con el lenguaje de corazón, oré al Imam Reza y le dije mi pena. Tenía una sensación extraña. Me senté en un rincón de este mausoleo celestial y me eché a dormir. Entonces soñé con una luz y oí una voz alta, que su reflejo entusiasmo mi corazón. Aquella voz me pidió que pronunciara mi nombre. Intente hacerlo, pero no pude realizarlo completamente. Dije otra frase pero esta vez completa: "Me llamo Reza". Pronunciando esta frase, de repente me desperté y me eché a hablar. Después de muchos años de estar mudo por fin pude hablar. Sentí una gran alegría. Al lado del mausoleo sagrado del Imam Reza, Dios Altísimo me curó, por eso cambie mi nombre por Reza. Felicitamos el aniversario del nacimiento del Imam Reza a todos ustedes, queridos oyentes. El Imam Reza nació en el año 148 de la hégira lunar, en la ciudad de Medina. Y después del martirio de su padre, el Imam Kazim, cuando tenía 35 años, se encargó de guiar a la comunidad islámica. Este periodo duró 20 años, entre esos años se traslado a Medina, y después a Marv. El Califa abasí, Mamún, obligó al Imam Reza a trasladarse a Marv, el centro de su gobierno, para así controlar sus actividades sociales y las relaciones del pueblo con él. Durante el liderazgo del Imám Reza, la tendencia de la gente hacia los miembros de la Casa profetica se amplió. Sin embargo, el Imam Reza gozaba de destacadas características morales, por lo que cautivaba la atención del pueblo. El Imam Reza organizaba y daba muchas clases, en las cuales respondía a las preguntas, y así la gente se enteraba de la profundidad de su ciencia divina. Por esta misma razón, le llamaban el Sabio de los Descendientes del Profeta. Al- Mamún organizaba los debates e invitaba a los científicos y pensadores de otras religiones a discutir con el Imam Reza, para ponerle bajo presión. Abdolsalam Heravi, uno de los personajes que asistía en muchos de estos debates decía: No conozco a nadie más sabio que el Imam Reza. Cualquier científico que ha debatido con él declaraba su superioridad científica. Ibrahim-inb-Abbas también asegura de que el Imam Reza no dejaba ninguna pregunta sin respuesta y de acuerdo a la Torá discutía con los judíos, conforme a la Biblia debatía con los cristianos y con los seguidores de cualquier religión hablaba de acuerdo a sus propios principios, hasta el punto de que algunos de los seguidores de otras religiones se convertían al Islam. Omran Sabi, uno de estos personajes, después de tantas horas discutir con el Imam Reza confesó la sabiduría de él y aceptó el Islam. Dicen que Imam Reza dividía sus propiedades entre los pobres, hasta el punto de que en una peregrinación a la Meca concedió todos sus bienes. Uno de sus compañeros le dijo: Este tipo de ayuda a la gente resulta una pérdida. Imam Reza respondió: Esta acción no se considera una desventaja. Lo veo como un negocio lucrativo. Una cosa que se aplica en nombre de Dios no es una pérdida. Imam Reza fue tan humilde que se sentaba sobre la tierra y merendaba junto con sus servidores. Volvemos a felicitarles por el aniversario del nacimiento del Imam Reza y concluimos este programa pronunciando unos dichos de él: La bondad es la mitad de la sabiduría. Con estos tres caracteres se completa la fe: El conocimiento profundo de la religión La Moderación en la vida La paciencia ante los problemas. Si la gente entiende la profundad de nuestras palabras, sin duda nos seguirá.
Fuentes : Irib
viernes
7 octubre 2011
20:30:00
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Los grandes hombres divinos son ejemplos, que no pertenecen a un tiempo específico, sino que sobrepasan los límites de la historia y en cualquier etapa pueden ser guías de los seres humanos. De ahí los valores humanos y espirituales, no se limitan a un lugar o tiempo especial.