Agencia Noticiosa Ahlul-Bait (P)

Fuentes : ABNA.ir
domingo

12 febrero 2012

20:30:00
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Armas Nucleares israelíes: La Verdadera Amenaza para la Humanidad

TEHERÁN, Irán. (ABNA) - El programa de armas nucleares israelí nació a través de la convicción de que el holocausto justificaría cualquier medida que Israel tomara para asegurar su supremacía militar en la región. Por consiguiente, Israel investigaba de forma activa la opción nuclear desde sus primeros días de su fundación. En 1949, H. Gimmel, una unidad especial del cuerpo científico del ejercito israelí comenzó un estudio geológico de dos años de duración en el desierto de Neguev con un ojo puesto hacia el descubrimiento de Reservas de Uranio. A pesar de que no se hallaron evidencias de dichas reservas, considerables cantidades de Uranio se encontraron en los depósitos de Fosfato.

Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA) - El programa dio otro paso adelante con la creación de la Comisión Israelí de Energía Atómica  ( IAEC) en 1952. Su jefe, Eernest David Bergmann, aconsejó durante muchos años a Israel a tener una bomba israelí como la mejor manera de asegurar que " nunca mas seremos como los corderos camino al matadero". Bergmann también era el jefe de la División de Investigación e Infraestructuras del Ministerio de Defensa ( conocida por su nombre hebreo EMET ) que reemplazó los centros de investigación del H. Gimmel, incluido el H. Gimmel, (ahora renombrado como Machon 4) como parte de la reorganización. Bajo la presidencia de Bergmann, la línea entre el IEAC y el EMET casi  se borró hasta el punto de que el Machon 4 funciona esencialmente como laboratorio maestro del IEAC.

En 1953, el Machon 4 no sólo perfeccionó un proceso para extraer el Uranio encontrado en el Neguev, sino también desarrolló un nuevo método de producir agua pesada suministrando a Israel con una nueva capacidad natural de producir uno de los materiales nucleares mas importantes.

Para el diseño y construcción del reactor, Israel buscó la ayuda de Francia. La cooperación entre los dos estados se data en los años 1950 cuando la construcción comenzó en el reactor francés 40 MWt y una planta de química en Marcoule. Francia era un socio natural para Israel y ambos gobiernos vieron la necesidad de una opción nuclear independiente como forma para que pudieran mantener un grado de autonomía en el ambiente bipolar de la guerra fría.

Al principio del 1956, Francia aceptó suministrar a Israel con un reactor de 18 MWt para la investigación, el estallido de la crisis del canal de Suez unas semanas mas tarde, cambió la situación de forma dramática. Después del cierre del Canal por parte de Egipto en Julio, Francia y Gran Bretaña acordaron con Israel que ésta última debería provocar una guerra con Egipto para dar a las naciones europeas un pretexto para mandar a sus tropas como fuerzas para mantener la paz, de esta forma ocuparían y abrirían el canal de Suez. Durante la crisis del canal de Suez, la ex Unión Soviética hizo una tímida amenaza contra los tres Estados. Este episodio no sólo aumentó la visión israelí de la necesidad de tener capacidad nuclear independiente, sino se llevó a la sensación de duda entre los lideres franceses de que fracasaron en cumplir con lo prometido hacia un socio. El primer ministro francés  Guy Mollet, incluso llegó a decir en privado que Francia " prestó" la bomba a Israel.

En Octubre de 1957, Francia e Israel firmaron un acuerdo revisado según el cual  Francia construiría un reactor de 24 MWt ( a pesar de que los sistemas de refrigeración y maquinaria para el manejo de residuos nucleares fueron designados a manejar tres veces la potencia acordada ) y en protocolos no firmados por escrito, una planta para procesar material químico. Este complejo fue construido en secreto, y lejos del régimen de inspección del IAEA por los técnicos franceses e israelíes del Dimona en el desierto de Naguev bajo la jefatura del coronel Manes Pratt del cuerpo de ordenanzas del Ejército israelí.

Las dos etapas del proyecto así como el secretismo hicieron que la construcción del Dimona fuera toda una hazaña. Una nueva agencia de inteligencia, la Oficina de Asuntos Científicos ( LEKEM) fue creada para prestar seguridad e inteligencia al proyecto. Durante la construcción, cerca de 1500 obreros israelitas y franceses fueron empleados en el Dimona. Para mantener el secretismo, oficiales de la aduana francesa fueron informados que los componentes mas grandes del reactor como el tanque, eran parte de una planta de desalineación requerida para América Latina. Además, después de la compra del agua pesada de Noruega bajo la condición de que no fuera traspasada a un país tercero, Las Fuerzas del Aire Francesas, y en secreto, transportaron mas de 4 toneladas de sustancias a Israel.

Los problemas no tardaron en surgir cuando en Mayo de 1960, Francia comenzó a presionar a Israel para que hiciera público el proyecto así como permitir la entrada a los inspectores internacionales al recinto del reactor, amenazando con paralizar el suministro de combustible del reactor hasta que lo hicieran público. El presidente De Gaulle sabía que el escándalo después de las revelaciones era inevitable, sobre la implicación de Francia en el proyecto, especialmente en cuanto a la planta de reforma química que pudiera tener repercusiones negativas para la posición internacional de Francia, ya agitada por su guerra en Argelia.

En una entrevista con Ben Gurion, De Gaulle ofreció vender a Israel un avión de combate a cambio de cesar de trabajar con la planta de procesamiento, e incluso volvió de la entrevista convencido de que el asunto estaba resuelto. No era así. En los siguientes meses, Israel trabajó sin compromiso. Francia mandaría Uranio y componentes ya requeridos y no insistiría en lo de los inspectores internacionales. A cambio, Israel aseguraría a Francia de que no tendrían intención alguna en fabricar armas atómicas, no reprocesaría plutonio, así como en no revelar la existencia del reactor, que se completaría sin la asistencia francesa. En realidad, casi nada había cambiado. Los expertos franceses terminaron el trabajo en el reactor y la planta de procesamiento químico, el combustible para el Uranio fue elaborado y el reactor fue viento en popa en 1964.

La primera vez que los EEUU supo de la existencia del Dimona fue después de que dos vuelos de los U-2 en 1958 capturaron las secuencias de la construcción de las instalaciones, pero no identificó como instalaciones nucleares hasta dos años mas tarde. El complejo era presentado vigorosamente como una fabrica textil, una estación de agricultura y como instalaciones de investigación metalúrgica, hasta que Ben-Gurion dijo en diciembre de 1960 que Dimona era un reactor nuclear, construido con "fines pacifistas".

Las dos siguientes décadas en que los EEUU y a través de una combinación de negligencia benigna, análisis erróneos, y una exitosa decepción israelí, fracasó en determinar los detalles del programa nuclear israelí. El 8 de Diciembre de 1960, la CIA publicó un informe denunciando la implicación del Dimona en la proliferación nuclear, y la base de la CIA en Tel Aviv determinó a mediados del 1960, que el programa de armas nucleares israelí era una realidad establecida e irreversible.

Los inspectores de los EEUU visitaron Dimona siete veces en 1960, pero no pudieron dibujar una imagen cierta de las actividades llevadas a cabo dentro del recinto, debido al estricto control israelí de la agenda de visitas. Los israelíes se fueron aún mas lejos, instalando paneles falsos de las habitaciones así como construyeron ascensores y pasajes que conducían a determinadas áreas del recinto. Los inspectores informaron de que no había claras actividades de investigación científicas o programa nuclear civil para justificar las circunstancias de las evidencias del reactor que pudieran demostrar que Israel estaba fabricando una bomba atómica, pero no encontraron evidencias de actividades relacionadas con armas nucleares como la existencia de la planta de procesamiento de plutonio.

Además de que el Gobierno de los EEUU no hizo mucho por demostrar la existencia del programa nuclear israelí, no hizo nada para pararlo. El embajador americano Walworth Barbour en Israel desde 1961-1973, años cruciales del programa de la bomba nuclear, primero vio que su trabajo se estaba convirtiendo en aislar al presidente de las realidades que pudieran empujarle a involucrarse en asuntos nucleares, alegando:" El presidente de los EEUU no me mandó aquí para traerle problemas. Él no quiere saber nada de asuntos sucios." Después de la guerra del 1967, Barbour, incluso hizo todo lo posible tendiendo puentes de inteligencia alrededor del Dimona. Incluso cuando balbour autorizó mandar la información, como lo hizo en 1966 cuando el personal de la embajada aprendió que Israel estaba comenzando a poner cabezas nucleares en los mísiles, el mensaje pareció perderse en la burocracia y nunca fue tomado en serio, tampoco se tomaron medidas al respecto.

A finales de 1968, la CIA hizo un informe concluyendo que Israel comenzó a producir con éxito armas nucleares. Esto fue basado, sin embargo, sobre conversaciones informales entre Carl Duckett, jefe de la CIA y Edward Teller, Jefe de la Oficina de Ciencias y Tecnología perteneciente a la CIA, Edward Teller, el padre de la bomba de hidrógeno. Teller dijo que, basado sobre conversaciones con amigos en los ambientes científicos y defensas israelíes, que Israel era capaz de fabricar la bomba, y que la CIA no debería esperar a que Israel lo probara para hacer un desarrollo final porque esta prueba nunca podría haberse llevado a cabo.

La CIA creyó que el arsenal israelí no mejoraría con el tiempo, en 1974, Duckett estimó que Israel tuvo entre 10 y 20 armas nucleares. La mayor fuente fue obtenida de la especulación de la CIA respecto al numero de posibles objetivos israelíes, y no a través de una investigación de inteligencia. Porque esta lista de objetivos era relativamente estática, la versión oficial de los EEUU permaneció así hasta los años 1980.

La actual reserva nuclear israelí así como su capacidad no son determinadas, y esto es motivo de varios informes y estimaciones. Se ha informado en mas de una ocasión de que Israel poseía dos bombas atómicas en 1967, y que el Primer Ministro Eshkol ordenó que fueran incluidas en la alerta de la Guerra de los Seis Días. También se ha informado que, temiendo la derrota en la Guerra de Yum Kippur en 1973, los israelíes se armaran con 13 bombas de 20-Kilotones.

Israel potencialmente podría haber producido algunas docenas de cabezas nucleares en el periodo entre 1970-1980. y poseído entre 100 a 200 cabezas nucleares a mediados de los noventa. En 1986, descripciones y fotografías de las cabezas nucleares israelíes fueron publicadas en el London Sunday Times de una fabrica clandestina de bombas. Las fotografías fueron tomadas por Mordechai Vanunu, un técnico nuclear israelí despedido. Su información llevó a algunos expertos a determinar que "Israel" tenía un depósito de 100 a 200 armas nucleares en aquel tiempo.

Corre el 1990, la inteligencia de los EEUU estimó que Israel tuvo entre 75 y 130 armas, basándose en estimaciones de producción. La reserva podría incluir de manera cierta a cabezas móviles para mísiles Jericó-1 y Jericó-2, así como bombas para los cazas israelíes e incluso cualquier otro tipo de armas nucleares tácticas. Algunas publicaciones calculan incluso que Israel podría tener mas de 400armas nucleares a finales de 1990.

El reactor Dimona es la fuente de plutonio para las armas nucleares israelíes, y el numero de armas nucleares que Israel fabricó, podría calcularse basándose sobre la potencia del reactor. La información hecha pública en 1986 por Mordechai Vanunu indicó en aquel momento, que el grado de plutonio en las armas era producidos a una escala de alrededor de 40 Kilogramos anualmente. Si los números corresponden con la capacidad productora periódicamente del reactor Dimona, los analistas sugieren que el reactor tiene la capacidad de 150 Megavatios, casi dos veces el nivel de energía que se pensaba que operaba en 1970. Para acomodar este nivel mas alto de energía, los analistas pensaron que Israel construyó un sistema de enfriamiento mas amplio. Una interpretación alternativa de la información suministrada por Vanunu era que el nivel de energía del reactor podría haber permanecido en 75 megavatios, y que el nivel de producción de plutonio a primeros de los años ochenta fue producido con materiales generados anteriormente.

Los máximos y mínimos límites posibles de la capacidad de almacenaje de Israel puede depender de varias variables, algunas de las cuales son genéricas a cualquier programa  de armas nucleares. El reactor puede haber operado a un promedio de 200 y 300 días al año, y producido aproximadamente 0.9 a 1.0 gramos de plutonio para cada día de megavatios térmicos. Israel puede utilizar entre 4 y 5 Kilogramos de plutonio en cada arma [ 5 kilogramos es una cantidad conservadora, y Vanunu informó que las armas israelíes utilizaron 4 Kg. ].

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