De acuerdo a la Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA) — El Hoyyatoleslam Saidi realizó esas declaraciones durante una ceremonia de despedida del representante del CGRI ante el Ayatolá Jamenei, Saheb Azzaman. "Los enemigos realizan sus máximos esfuerzos para desviar las actuales revoluciones islámicas en la región. La nación iraní, no obstante, está comprometida a resistir ante las potencias arrogantes, incluidos los EEUU. Los enemigos tratan de influir a la nación iraní por medio de las presiones económicas, y forzándola a enfrentarse al sistema de la República Islámica", señaló.
Añadió que las próximas elecciones presidenciales de 2013 en Irán es otro de los escenarios que los enemigos intentan utilizar, para impedir que la República Islámica avance hacia adelante.
Desde principios de 2011, la región ha experimentado una ola creciente de manifestaciones populares, y que han tenido como resultado el aumento de la conciencia y la vigilancia de los pueblos.
Túnez experimentó el derrocamiento de Zin El Abidine Ben Ali en una revolución popular, en enero de 2011, la cual fue seguida por otra revolución que derrocó a Hosni Mubarak en Egipto, en febrero también del 2011.
Líbia fue el tercer país islámico que protagonizó el Levantamiento Islámico. Los líbios también consiguieron la victoria tras una sangrienta campaña contra el dictador Muammar Al-Gaddafi.
Bahrein, Jordania, Kuwait, Arabia Saudí y Yemen han visto desde entonces como se producían manifestaciones de protesta contra sus gobernantes, los cuales recurrieron a reprimir duramente las manifestaciones y a silenciar a sus críticos. En Yemen, a pesar de que el pueblo derrocó al dictador y eligieron a un nuevo Presidente, la revolución continúa, porque los aliados y familiares del ex dictador, Ali Abdullah Saleh todavía ocupan puestos clave en el país y no han sido llevados ante la justicia.
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