Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA) — Según Hadi al-Musavi, responsable de la oficina de libertades y derechos humanos del partido bareiní, las sentencias de cárcel emitidas durante esos tres meses contra los detenidos superan los 3500 años.
“Durante este periodo, el régimen de Al Jalifa ha arrestado a 328 personas, entre ellas tres mujeres y 30 niños. Además ha revocado la ciudadanía a 8 opositores bareiníes”, ha explicado Al-Musavi.
La fuente detalla que, en este breve tiempo, se han registrado 608 asaltos contra las viviendas de los manifestantes y 104 casos de tortura y maltrato a los mismos.
“Los ciudadanos han celebrado 1644 protestas de las que 722 han sido reprimidas y 124 personas han resultado heridas”, ha añadido al respecto.
Al-Musavi ha denunciado también las medidas insultantes del régimen de Manama contra las santidades de los chiíes.
Las autoridades bareiníes no toleran manifestaciones antigubernamentales y, además de rechazar satisfacer las demandas de su pueblo, recurren a cualquier medida represiva para sofocar a los opositores.
Un tribunal bareiní suspendió hace días todas las actividades del partido Al-Wifaq, una decisión que provocó incluso la preocupación del aliado del pequeño país del Golfo Pérsico, Estados Unidos, que la consideró contradictoria a la creación de un ambiente propicio para la “integración política”.
Desde febrero de 2011, Baréin es escenario de manifestaciones casi diarias, que son reprimidas por las fuerzas de seguridad, secundadas por las milicias de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos (EAU), con el apoyo logístico de países occidentales, principalmente de Estados Unidos.
La libertad de los presos políticos, la retirada de las fuerzas saudíes del país y el fin de la monarquía, figuran entre las principales demandas de los manifestantes.
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