Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA) – El Ayatolá Nuri Hussain Hamedani se ha reunido con el jefe de la Orfganización para la Movilización de los Oprimidos (Basiy), General de brigada Mohammad-Reza Naqdi. El Ayatolá Nuri-Hamedani discutió las distinciones de la Revolución Islámica.
El Ayatolá Nuri Hamedani le dijo al General de brigada Naqdi que todas las personas deben agradecer ya poyar al Basiy debido a sus servicios a la Revolución Islámica y de los oprimidos y deben saber que sus actividades están llenas de bendiciones y sinceridad. Una de las tareas más importantes es la protección de la Revolución Islámica para que ésta pueda alcanzar sus objetivos de la resistencia en contra de la oposición y de los problemas. El Basiy está activo en todos los campos.
La Revolución Islámica tiene muchas distinciones sobre todas las demás revoluciones en el mundo y él declaró que la mayor distinción de la Revolución Islámica incluye que esta se basa en la ley islámica y prevé la posición del tutor-jurisprudente (Wali-e Faqih) en su constitución. “Debemos darnos cuenta de que la posición del tutor-jurisprudente es la misma posición de la profecía en relación con la gobernanza y la tutela de las personas y musulmanes”, dijo Su Eminencia.
El Ayatolá Nuri Hamedani declaró que otra distinción de la Revolución Islámica fue que esta apoya a los oprimidos y desfavorecidos en todo el mundo: “Hoy en día todos los oprimidos del mundo miran hacia el Irán islámico con esperanza. El brazo que apoya a Irán es el Basiy”.
Además, el Ayatolá Nuri Hamedani explicó que el grupo terrorista takfirí Daesh es una herramienta de las potencias arrogantes del mundo y otra de las distinciones de la Revolución Islámica es su movilización en contra de las potencias arrogantes: “Con su creación y protección de los grupos terroristas como el Daesh, las potencias arrogantes del mundo tratan de aniquilar esta distinción de la Revolución Islámica y tratan de crear divisiones entre los musulmanes para que Israel pueda tener oportunidades para reconstruirse”.
Al final de su discurso, Su Eminencia dijo que el Líder Supremo de la Revolución Islámica (Ayatolá Sayyed Alí Jamenei) es una persona hábil, valiente y reflexivo: “El Ayatolá Jameneí ha guiado este sistema hasta hoy con el mejor método posible. El Basiy que ha desempeñado un papel en el aseguramiento de la Revolución Islámica, debe esforzarse siguiendo la guía del Líder Supremo en [los campos de] la resistencia y el avance de la revolución”.
Jalil Sahurie
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