De acuerdo a la Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA) - “Salman enfrenta a nuevas acusaciones tras ser interrogado por el poder judicial bareiní ese mismo día”, ha anunciado su abogado Abdolá al-Shamlawi, además de informar que el tribunal de la monarquía árabe extendió el periodo de la detención de su cliente.
Según Al-Shamlawi, Salman está acusado de promover el cambio político por medios ilegales, incitar de manera explícita al odio contra sectores específicos de la sociedad y al incumplimiento de la ley y de insultar al Ministerio del Interior, ha indicado Al-Shamlawi, al mismo tiempo, ha asegurado que el líder de la oposición bareiní ha rechazado todos los cargos en su contra.
La detención del secretario general del principal partido opositor de Baréin (Al-Wefaq) ha generado una ola de marchas antigubernamentales desde la semana pasada.
En la misma jornada del domingo, miles de los bareiníes se han volcado a las calles de la ciudad de Manama (la capital) para expresar su ira por la detención del prominente clérigo chií, así como solicitar su excarcelación.
Los manifestantes han coreado eslóganes contra el régimen en el poder desde hace 40 años mientras marchaban hacia el edificio del Ministerio del Interior del pequeño país del Golfo Pérsico.
El pasado 28 de diciembre, Al-Wefaq comunicó que Salman, de 49 años, había sido arrestado después de 10 horas de interrogatorios por la Policía de Baréin bajo la acusación de “incitar al derrocamiento”.
Esta medida del régimen de Al Jalifa ha provocado una gran ola de condenas tanto a nivel nacional como a nivel regional e internacional. La Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y numerosos organismos y países del mundo han pedido la inmediata puesta en libertad de la gran figura política y religiosa de Baréin.
Desde principios de 2011, los bareiníes protagonizan manifestaciones contra la monarquía Al Jalifa, en su mayoría convocadas por Al-Wefaq, para reclamar el fin del “monopolio de poder”, así como la instauración de un sistema constitucional y un poder judicial independiente. Sin embargo, casi todas las protestas son reprimidas por las fuerzas bareiníes.
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