De acuerdo a la Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA), Esta jornada de protesta también ha sido reprimida con mano de hierro por parte de los efectivos bahreiníes de seguridad, aunque no se ha emitido hasta el momento, informes sobre los eventuales heridos o detenidos.
Durante la protesta, los manifestantes, con los ulemas religiosos a la cabeza, han pedido la liberación inmediata del Sheij Ali Salman y otros activistas detenidos por las fuerzas del régimen de Manamá.
Un imam de rezo colectivo bahreiní ha criticado que el régimen de Al Jalifa haya optado por ignorar las demandas legítimas acerca de la liberación del líder opositor bahreiní.
De igual manera ha advertido a las autoridades de Manamá de que no podrán reprimir para siempre las demandas de esa nación, pues esa nación no abandonará las calles hasta ver cristalizados sus objetivos.
Ese clérigo bahreiní ha indicado que Sheij Ali Salman siempre abogaba por la seguridad, estabilidad y reformas en este país árabe e insistía en el carácter pacífico de las movilizaciones callejeras de los bahreiníes, por lo que según él, el régimen gobernante ordenó la detención de Salman bajo acusaciones infundadas.
El pasado 28 de diciembre, Al-Wefaq comunicó que Salman, de 49 años, había sido arrestado después de 10 horas de interrogatorios por la policía.
Salman está acusado de promover el cambio político por medios ilegales, incitar de manera explícita al odio contra sectores específicos de la sociedad y al incumplimiento de la ley, así como de insultar al Ministerio del Interior.
El pasado lunes, la Fiscalía General de Bahréin anunció su decisión de ampliar 15 días más el periodo de detención del líder opositor.
Esta medida del régimen de Al Jalifa ha provocado una gran ola de condenas, tanto a nivel nacional como internacional. La ONU, la Unión Europea (UE) y numerosos organismos y países han demandado la inmediata puesta en libertad de esta prominente figura política y religiosa de Bahréin.
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