De acuerdo a la Agencia de Noticias de Ahlul Bait (ABNA), El ataque ha tenido lugar este domingo en una localidad cercana a la ciudad estratégica de Quneitra, situada en el suroeste de Siria, donde un helicóptero militar israelí ha lanzado dos misiles contra dos vehículos de las milicias de Hezbolá, asesinando a cinco personas, entre ellos el hijo de Imad Mughniyeh, el máximo comandante asesinado de Hezbolá.
Yihad Mughniyeh y comandante de campo Mohamad Issa, conocido como "Abu Issa", murieron en el ataque, ha informado una fuente de seguridad libanesa al diario local Daily Star.
Mediante un comunicado emitido horas después del ataque, Hezbolá ha confirmado el incidente diciendo que "fueron martirizados varios muyahidines (combatientes)", durante una misión de reconocimiento en la ciudad siria de Quneitra.
Por su parte, una fuente de seguridad israelí ha alegado que el ataque era dirigido a "elementos terroristas" acusados de preparar ataques contra los territorios palestinos ocupados por el régimen de Israel.
En la crisis que azota Siria desde hace casi cuatro años, Hezbolá desempeña un papel muy diferente que el del régimen israelí. El primero lucha al lado del Ejército y la nación sirios contra los grupos terroristas como el Daesh, y el otro es un principal patrocinador de las bandas terroristas que luchan contra la nación siria.
El pasado agosto, el secretario general de Hezbolá, Seiied Hasan Nasrolá, aseguró que la participación del movimiento libanés en la lucha antiterrorista en Siria ha evitado que los grupos extremistas lleguen hasta Beirut, la capital de El Líbano.
No obstante, el ejército israelí en reiteradas ocasiones ha atacado al territorio sirio para ayudar a los grupos terroristas que luchan para derrocar al actual Gobierno democrático del presidente Bashar al-Asad.
El régimen de Tel Aviv ha brindado todo tipo de ayuda a los grupos terroristas en Siria e Irak y las autoridades israelíes han afirmado en muchas ocasiones que no consideran a los grupos como Daesh o Frente Al-Nusra una amenaza.
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