Según la Agencia Noticiosa Ahlul Bait (ABNA) – AI ha pedido este vienes a los mandos bahreiníes que aprovechen la carrera del Gran Premio de Fórmula 1 —que tiene lugar este fin de semana— para liberar de inmediato y sin condiciones a todos los presos que hayan sido detenidos únicamente por haber expresado su opinión.
"Detrás de los coches rápidos y las vueltas de pista triunfales no hay que olvidar que está un Gobierno que estrecha el cerco para tratar de asfixiar todo resto de oposición en el país, multiplicando las detenciones, las intimidaciones y el acoso a la oposición política y las voces críticas", ha declarado el subdirector del programa de Amnistía Internacional para Oriente Próximo y el Norte de África, James Lynch.
Lynch ha lamentado además que, debido a la situación severa que vive el régimen de Bahréin, sean castigados los bahreiníes que critican a las autoridades de su país o que piden reformas.
El pueblo bahreiní empezó a criticar a las autoridades después de que en 2011, castigaran severamente a la mayoría shiíta que se manifestaba para reclamar reformas, entre ellas la de instaurar una monarquía constitucional y la elección de un primer ministro.
No se trata de la primera vez en que el organismo internacional pide la liberación de los opositores bahreiníes de la cárcel. En octubre de 2015, exigió al régimen bahreiní la liberación inmediata del opositor político Ali al-Ekri, que cumplía una condena de cinco años en circunstancias inhumanas, por ejercer pacíficamente su derecho a la "libertad de expresión y de reunión".
Desde entonces, Amnistía Internacional ha condenado en reiteradas ocasiones las medidas de las autoridades del país árabe, que incluyen desposeer de su nacionalidad a ciertos opositores, una práctica “ilegal”, según el organismo.
Cerca de 4000 presos políticos están encarcelados en Bahréin sin un juicio justo, tal y como anunció el pasado septiembre el presidente del Centro de Bahréin por los Derechos Humanos (BCHR, por sus siglas en inglés), Nabil Rayab.
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