‘La Erradicación del Tumor Maligno del Terrorismo Wahhabí Necesita Unidad Política y Popular’

Hezbolá condenó las explosiones terroristas llevadas a cabo en las proximidades de Al-Masyid Al-Nabawi, la sagrada mezquita del Profeta en Medina y en otra mezquita de la zona de Qatif al este de Arabia Saudí.

Esos atentados, cuyos blancos han sido los lugares más sagrados en la región de las distinguidas mezquitas y en la época más sagrada del fin del mes del Ramadán son otra muestra más de que los terroristas desprecian todos los santos y sagrados lugares y festividades de los musulmanes, y no les importan lo más mínimo, afirmó Hezbolá.

En su comunicado, Hezbolá afirma que estos crímenes cometidos por los terroristas demuestran que ellos no tienen ninguna relación con el pueblo musulmán ni con la religión de Islam: "Los atentados terroristas de la madrugada de este lunes en Arabia Saudí son la continuación de los terribles y malvados crímenes cometidos por ellos en otras zonas como Turquía, Iraq, Bangladesh y el Líbano", informó ese partido en su comunicado.

Y añade: "Los gobiernos, los estados y las organizaciones regionales e internacionales, para enfrentarse a esos terribles atentados Takfiríes, necesitan llevar a cabo una revisión íntegra y reconsiderar sus conceptos y posicionamientos frente al terrorismo , así como sobre su financiación económica y armada, apoyo político y mediático en la cobertura y justificación de sus crímenes, mas aún cuando ya se ha aclarado que algunas de las victimas del terrorismo son sus propios patrocinadores y confirmadores."

Hezbolá asegura que la región y todo el mundo se enfrentan a un examen real sobre el concepto de convergencia e integridad en la guerra contra el terrorismo y los terroristas, y no deberían aprovecharse de ellos en sus conflictos regionales e internacionales, ajustando sus propias cuentas políticas, cuyas consecuencias negativas afectan a todos.

Según las primeras informaciones, tras los tres estallidos producidos en las cercanías de la Mezquita del Profeta, en Medina y en la ciudad de Qatif al este de Arabia Saudí, varias personas han perdido la vida y otras han resultado heridas.


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