Rafsanyani efectuó esas declaraciones durante una reunión mantenida con el ex vicepresidente iraquí Jazir al-Jazaei, el lunes en Teherán.
“Confiábamos que tras la caída de Saddam experimentaríamos la expansión de nuestras relaciones y cooperación en una atmósfera de calma y seguridad, pero lamentablemente, los conflictos regionales han reducido los engranajes de esa cooperación”, afirmó.
Ambos países deben aprovechar las capacidades existentes para fortalecer el Islam y los países regionales, especialmente entre Irán e Iraq”, añadió.
“Cuidad que los restos de los terroristas no se dispersen por sus ciudades” advirtió.
El enviado iraquí por su parte, manifestó que los políticos aseguran que Irán es la puerta del mundo hacia el este, e Iraq es la llave de esa puerta, señaló.
El liderazgo sin precedentes del fallecido Imam Jomeini y el significativo papel de las altas autoridades, como el eminente Ayatolá Rafsanyani permanecerán en la historia para siempre para hallar una salida a las dificultades de Irán, aseguró.
Durante el encuentro, al-Jazaei también informó a Rafsanyani sobre los últimos problemas políticos, económicos, culturales, sociales y de seguridad que afronta la nación iraquí, y manifestó que Iraq está decidido a superar todos los desafíos y amenazas exitosamente.
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