Detrás de decenas de amenazas de bomba que ha sufrido la comunidad judía en EE.UU. en lo que muchos han llamado una ola de antisemitismo registrada desde enero se esconde un adolescente judío de 19 años. Este jueves la Policía israelí detuvo al sospechoso de haber amenazado a decenas de instituciones judías establecidas en suelo estadounidense, pero también a organismos de Australia y Nueva Zelanda, así como al menos a una aerolínea comercial, que tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia debido a la falsa alarma.
El sospechoso es de Ashkelon, una región ocupada el '48 por el ente sionista de Israel al sudeste de Palestina. “Este es el hombre del que estamos hablando”, dijo el portavoz de la policía a los medios, Micky Rosenfeld. Las autoridades, que todavía no han revelado la identidad del detenido, afirmaron que es un joven judío con doble nacionalidad, judía y estadounidense.
Desde Estados Unidos celebraron la noticia. El arresto hoy en Israel supone la culminación de una investigación a gran escala a través de varios continentes por los crímenes de odio contra las comunidades judías en nuestro país”, dijo en un breve comunicado el fiscal general estadounidense, Jeff Sessions.
“El Departamento de Justicia está comprometido a proteger los derechos civiles de todos los estadounidenses y no toleraremos que ninguna comunidad de nuestro país sea atacada por sus creencias religiosas. Felicito al FBI y a la Policía israelí por su sobresaliente trabajo en este caso”, añadió Sessions.
El propio Buró Federal de Investigaciones (FBI) confirmó hoy en un comunicado haber colaborado con la Policía israelí para detener a un adolescente con la doble ciudadanía de Israel y Estados Unidos.
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