Según la Agencia Noticiosa de Ahlul Bait (ABNA) - Israel retrasó una votación ministerial sobre el proyecto de ley el domingo sin explicación, pero un funcionario le dijo al diario Haaretz que la versión actual del proyecto de ley "invita a la presión internacional e involucra asuntos legales difíciles".
"Estamos en contacto con los estadounidenses", dijo Netanyahu durante una reunión del gabinete, explicando que la administración estadounidense había pedido a Israel aclaraciones sobre el llamado "proyecto de ley del Gran Jerusalén".
"Los estadounidenses recurrieron a nosotros y nos preguntaron de qué se trataba el proyecto de ley. Como hemos estado coordinando con ellos hasta ahora, vale la pena hablar y coordinar con ellos. Estamos trabajando para promover y desarrollar la empresa de asentamientos", dijo.
De aprobarse, la legislación se anexaría todos los territorios palestinos en los tres principales mega-asentamientos de Maale Adumim, Givat Zeev y Gush Etzion, que en conjunto albergan a unos 150.000 israelíes.
Agregaría a los israelíes que viven allí a la población de Jerusalén al-Quds, convirtiéndolos en "submunicipios" de la ciudad ocupada y degradando el estatus de tres barrios árabes más allá del muro de separación de Israel.
El ministro israelí de Transporte e Inteligencia, Yisrael Katz, dijo que la votación del proyecto de ley debe llevarse a cabo y agregó que apunta a "salvaguardar a la mayoría judía en la capital y fortalecer nuestro control sobre la ciudad".
"Garantizar la mayoría judía en Jerusalén (al-Quds) es una misión histórica y todos debemos trabajar juntos para cumplirla", dijo Katz.
Israel reclama toda la ciudad de Jerusalén al-Quds como su capital. El régimen del apartheid sionista está expandiendo los asentamientos en las partes de la ciudad que los palestinos quieren convertir en la capital de su futuro estado independiente.
El plan altamente provocativo, de ser implementado, cambiaría significativamente el equilibrio demográfico oficial de Jerusalén al-Quds, convirtiéndolo en una ciudad más "judaizada".
Israel también considera que la ocupada Ribera occidental es "tierra liberada" y dice que su anexión formal es solo cuestión de tiempo.
Más de medio millón de colonos extremistas israelíes viven en más de 230 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación israelí de 1967 de los territorios palestinos de la Ribera occidental y Jerusalén Este al-Quds.
La ONU a la luz del derecho internacional considera los asentamientos israelíes como ilegales, porque los territorios en los que fueron construidos fueron capturados por Israel en la guerra de 1967 y, por lo tanto, están sujetos a los Convenios de Ginebra, que prohíben la construcción en tierras ocupadas.
Bajo Netanyahu, Israel ha intensificado la expansión de los asentamientos frente a la tibia reacción internacional. La elección del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, hizo que Tel Aviv revelara un plan de arreglo masivo que había suspendido durante años.
El jueves, el Departamento de Estado de Estados Unidos dijo que no estaba preocupado por el nuevo proyecto de ley de anexión porque estaba muy lejos de ser aprobado por el Knesset.
Washington está "desalentando acciones que cree que distraerán indebidamente a los directores de enfocarse en el avance de las negociaciones de paz", dijo un funcionario estadounidense no identificado.
Peace Now, una ONG israelí anti-asentamientos, también instó a Trump a oponerse al proyecto de ley.
"Si el presidente Trump ahora permite la anexión de asentamientos, condenará a israelíes y palestinos a conflictos perpetuos y derramamiento de sangre, y se convertirá en un socio para convertir a Israel en un paria internacional", dijo.
Jalil Sahurie
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Fuentes : ABNA24
lunes
30 octubre 2017
8:42:37
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ENTE SIONISTA. (ABNA) - El primer ministro Benjamin Netanyahu dice que Israel hablará con Estados Unidos antes de seguir adelante con un controvertido proyecto de ley para anexar asentamientos construidos en terrenos palestinos en Jerusalén al-Quds.