Según la Agencia Noticiosa de Ahlul Bait (ABNA) - El cable de la embajada clasificado, escrito en hebreo, constituye la primera evidencia formal que demuestra que los saudíes y los israelíes se están coordinando deliberadamente para intensificar la situación en el Medio Oriente.
El explosivo cable israelí clasificado revela lo siguiente:
- El domingo, justo después de la sorprendente renuncia del primer ministro libanés Hariri, Israel envió un cable a todas sus embajadas con el pedido de que sus diplomáticos hagan todo lo posible para aumentar la presión diplomática contra Hezbolá e Irán.
- El cable instó a apoyar la guerra de Arabia Saudí contra los huzis respaldados por Irán en Yemen.
- El cable enfatizó que Irán estaba involucrado en la "subversión regional".
- Se instó a los diplomáticos israelíes a apelar a los "altos funcionarios" dentro de sus países de acogida para tratar de expulsar a Hezbolá del gobierno y la política libanesas.
Izquierda: el primer ministro israelí Netanyahu, derecha: el príncipe saudí Mohammed bin Salman
Como ya es bien sabido, la causa común saudí e israelí contra la percepción de la influencia iraní y la expansión en lugares como Siria, Líbano e Irak en los últimos tiempos ha llevado a los amargos enemigos históricos por un camino pragmático de cooperación tácita, ya que ambos parecen haberse propuesto la destrucción de la llamada "media luna Shiíta" como su principal objetivo de política en la región. Para Israel, Hezbolá ha sido durante mucho tiempo su mayor enemigo, lo que los líderes israelíes ven como una extensión de la presencia territorial de Irán justo frente a la frontera norte de la entidad sionista.
El periodista israelí que obtuvo el documento es Barak Ravid, corresponsal diplomático senior de Channel 10 News. Ravid anunció ayer lo siguiente a través de Twitter:
- Publiqué en el canal 10 un cable enviado a diplomáticos israelíes que pedían hacer lobby para los saudíes / Hariri y contra Hezbolá. El cable enviado desde el Ministerio de Asuntos Exteriores en Jerusalén [Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel] a todas las embajadas israelíes toca la línea saudí con respecto a la renuncia de Hariri.
- A los diplomáticos israelíes se les ordenó demarcar a sus gobiernos anfitriones sobre la situación política interna en Líbano, una movida muy rara.
- El cable decía: "Hay que enfatizar que la renuncia de Hariri muestra cuán peligrosos son Irán y Hezbolá para la seguridad del Líbano".
- "La renuncia de Hariri demuestra que no es correcto el argumento de que la participación de Hezbolá en el gobierno estabiliza a Líbano", agregó el cable.
- El cable instruyó a los diplomáticos israelíes a apoyar a Arabia Saudí en su guerra contra los huzis en Yemen. El cable también destacó: "El lanzamiento de misiles por parte de los huzis hacia Riyad exige aplicar más presión sobre Irán y Hezbolá".
Vea el informe hebreo Channel 10 News de hoy, que presenta el cable diplomático israelí, cuyo texto aparece en la captura de pantalla del Canal 10 (abajo), aquí.
A continuación se muestra una traducción aproximada del cable clasificado de la embajada israelí según lo publicado por el canal 10 de noticias de Israel:
- "Al Director General: se le solicita que se ponga en contacto urgentemente con el Ministerio de Relaciones Exteriores y otros funcionarios gubernamentales pertinentes [de su país de acogida] y destaque que la renuncia de Al-Hariri y sus comentarios sobre las razones que lo llevaron a dimitir ilustran una vez más la naturaleza destructiva de Irán y Hezbolá y su peligro para la estabilidad del Líbano y los países de la región.
- La renuncia de Al-Hariri demuestra que el argumento internacional de que la inclusión de Hezbolá en el gobierno es una receta para la estabilidad es básicamente erróneo. Esta unidad artificial crea parálisis y la incapacidad de los poderes soberanos locales para tomar decisiones que sirvan a su interés nacional. Los convierte efectivamente en rehenes bajo amenaza física y se ven obligados a promover los intereses de una potencia extranjera, Irán, incluso si esto puede poner en peligro la seguridad de su país.
- Los eventos en Líbano y el lanzamiento de un misil balístico por parte de los signatarios del acuerdo de Riad requieren una mayor presión sobre Irán y Hezbolá sobre una serie de cuestiones, desde la producción de misiles balísticos hasta la subversión regional".
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