Según la Agencia Noticiosa Ahlul Bait (ABNA) – El régimen de Arabia Saudí ha anunciado oficialmente que ha puesto en práctica la pena de muerte de 37 personas.
Según una nota del Ministerio del Interior, las víctimas son ciudadanos saudíes, la mayoría de los cuales provienen de la mayoría de la zona shiíta de Qatif. Las ejecuciones se llevaron a cabo dentro de las cárceles de diferentes ciudades del país.
Treinta y dos de las treinta siete víctimas totales eran musulmanes shiítas.
Entre ellos se encuentran algunos miembros del clero shiíta local, así como varios niños que aún no eran mayores de edad en el momento del arresto.
La acusación oficial de las penas de muerte fue la participación en actos de violencia, pero según las organizaciones de derechos humanos tales acusaciones serían completamente inventadas por el régimen.
Las autoridades saudíes también han sometido a los acusados a tortura para extorsionarles confesiones forzadas, negándoles el acceso a las garantías establecidas por las regulaciones internacionales con respecto a un juicio justo e imparcial.
Las ejecuciones sumarias están provocando una ola de protestas y la indignación mundial. Varias organizaciones e instituciones internacionales han condenado enérgicamente al régimen saudí por su gesto brutal.
Entre ellos se encuentran el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que emitió una dura declaración de la Presidenta Michelle Bachelet, solicitando abrir una investigación independiente para aclarar los hechos.
También de la Unión Europea, Human Rights Watch, Amnistía Internacional y varios gobiernos como el de Irán.
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