Un clérigo iraní destacó el papel crucial del diálogo entre líderes religiosos en la promoción de la paz, el entendimiento mutuo y la armonía social.
Huyyatulislam Mohammad Mahdi Tasjiri, jefe de asuntos internacionales de la Universidad de Religiones y Denominaciones en Qom, comentó sobre la reciente reunión de una delegación iraní con el Papa Francisco en el Vaticano.
Tasjiri recordó las luchas compartidas que enfrenta la humanidad hoy en día, incluida la pobreza, la desigualdad, el cambio climático, las pandemias, las crisis ambientales y las guerras.
Señaló que las religiones, con sus enseñanzas morales y éticas comunes, están bien posicionadas para colaborar y proponer soluciones a estos problemas urgentes.
“El diálogo interreligioso puede sentar las bases para esa cooperación y sinergia”, afirmó, añadiendo que una mayor concienciación entre las sociedades globalizadas sirve como camino para lograr una paz duradera y rechazar las agendas belicistas.
El clérigo destacó la innegable influencia de los líderes religiosos en la formación de la opinión pública y la promoción de valores de tolerancia y convivencia. “Los líderes religiosos, debido a su estatus e influencia entre sus seguidores, pueden desempeñar un papel crucial en la promoción de la paz, la tolerancia y la coexistencia”, afirmó.
Tasjiri también abogó por la importancia de celebrar reuniones interreligiosas periódicas como medio para amplificar el mensaje de paz a escala mundial.
Describió estas reuniones como una necesidad tanto moral como práctica para abordar los desafíos globales y contrarrestar los actos de agresión, como los ataques de Israel a la Franja de Gaza.
“Estas conferencias no son simplemente obligaciones morales, sino pasos esenciales hacia la construcción de un mundo pacífico y justo”, afirmó. Según el clérigo, el diálogo debe centrarse en los valores compartidos y los principios humanos universales, valores enfatizados tanto en la fe abrahámica como en la no abrahámica.
Luego pidió respeto mutuo por las diferentes creencias y perspectivas, describiéndolo como una piedra angular de la unidad global.
Sin embargo, Tasjiri advirtió contra limitar el diálogo interreligioso a discusiones teóricas.
Instó a los participantes a buscar soluciones tangibles y practicables a los desafíos contemporáneos. "El diálogo no debe quedarse en lo teórico, sino buscar soluciones prácticas, de lo contrario corre el riesgo de convertirse en otro documento histórico, olvidado con el tiempo", advirtió.