El primer ministro palestino, Mohammad Shtayyeh, denunció este martes que las fuerzas de seguridad israelíes mataron en 2022 a más de 220 ciudadanos en los territorios ocupados e hirieron a más de 9.000.
Al intervenir en el inicio de la reunión semanal del gabinete, el jefe de Gobierno afirmó que los militares y los policías de Tel Aviv arrestaron este año a unos 6.500 palestinos.
Más de 832 edificios y estructuras fueron demolidas y 13.000 árboles de olivos arrancados, criticó.
“Enfrentamos crisis complejas porque la economía nacional sufrió “debido a la disminución significativa de la ayuda internacional, las repercusiones de la Covid-19, la guerra de Ucrania y al robo de nuestros impuestos por parte de “Israel””, subrayó.
Citado por la agencia oficial de noticias WAFA, Shtayyeh aseguró que al pueblo palestino no le asusta las amenazas del próximo Gobierno israelí, el más derechista en la historia de esa nación.
En el pasado ya enfrentamos situaciones graves, todos sabemos que esta es una batalla política, manifestó.
El primer ministro señaló que la mayor parte del mundo respalda la causa palestina.