Pues los planes israelíes para reducir la identidad nacional de los palestinos quedaron claros desde el momento en que se estableció el Estado de Israel a expensas de los derechos nacionales e históricos de los palestinos, y en este día ratifican con más vigor su promesa de que no abandonarán su tierra ocupada por el ente ocupacionista, el que controla ya más del 85 por ciento de los territorios palestinos y el que continúa sus actos de expansión de los asentamientos y demolición de hogares palestinos, con el objetivo de eliminar la presencia palestina.
47 años después de aquel 29 de febrero de 1976, origen del Día de la Tierra Palestina, después de que las autoridades israelíes confiscaron 21 mil dunoms (1 dunom = 900 m2) de tierras de aldeas palestinas en el centro de Galilea para construir más asentamientos sionistas dentro del marco de la política de judaización de Palestina, donde cayeron mártires 7 jóvenes palestinos desarmados en defensa de su tierra, y más de 100 resultaron heridos, y varios cientos más fueron arrestados; Israel continúa su expropiación, expandiendo sus asentamientos ilegales en territorio ocupado.
Siendo las colonias israelíes consideradas ilegales por la Organización de Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y la gran mayoría de la comunidad internacional por violar la convención de Ginebra al construir en terrenos ocupados, hasta ahora nadie hace nada por detener la impunidad y sancionar al régimen israelí, que lleva más de siete décadas desplazando y desalojando por la fuerza a la población palestina; esas acciones, sumadas a la construcción de asentamientos ilegales, constituyen un crimen al que de acuerdo a los expertos se llama “domicidio”.
Sólo en el pasado mes de enero las autoridades israelíes demolieron 132 edificaciones palestinas en 38 comunidades en la Ribera occidental ocupada, 34 de ellas eran estructuras residenciales y 15 habían sido financiadas por donantes, lo que representa una amenaza para la existencia del pueblo palestino. A eso se suma el aumento significativo en el ritmo de expansión de colonias israelíes, recientemente el ocupante anunció 83 planes para establecer más de 22.000 viviendas, en la ciudad ocupada de Jerusalén y el resto de la Ribera occidental.
Toda una maniobra del nuevo gobierno de Netanyahu, en su sexto mandato con socios ultraortodoxos y de extrema derecha que marcan la agenda política, la que impulsará la expansión de asentamientos en la Ribera occidental; ya que “El pueblo judío tiene un derecho exclusivo e inalienable en todas las partes de la tierra de Israel. El gobierno promoverá y desarrollará asentamientos en todas las partes de la tierra de Israel -en Galilea, en el Néguev, en el Golán, en Judea y Samaria (Ribera occidental)”, declaración que hizo Netanyahu en su posesión.
Y al parecer ese sigue siendo su desafío; pues su reforma judicial que implantó, la que llevó a las 3 semanas de numerosas protestas, y la crisis política que desató y la que tuvo que postergar hasta finales de abril para evitar una guerra civil, “echará a los palestinos al mar”, como lo señalan los analistas; ya que los supremacistas de extrema derecha fundamentalista judía, que están gobernando quieren legalizar aquellos asentamientos declarados antes como ilegales, expuestos por la propia ONU como un “crimen de guerra”; sin embargo hasta ahora EEUU y Europa se niegan a pedir un Tribunal Internacional para los mandatarios israelíes, por dichas atrocidades, dejándolos en la impunidad.
La hipocresía del Gobierno de Estados Unidos en continuar su apoyo a Israel es contundente, porque hasta ahora no ha cortado el suministro de armas, y no ha congelado los miles de millones de dólares que se le entrega como “asistencia militar” bajo la Ley de Autorización de Defensa Nacional, pues lo que se quiere es socavar la soberanía palestina y terminar la limpieza étnica en marcha desde hace décadas, manteniendo la presencia militar israelí permanente en ocupada Ribera occidental, y continuando con su escalada de violencia masiva, la última incursión en las ciudades palestinas de Nablus, Yenín, Ramalá, Al-Jalil (Hebrón), y la ciudad de Al-Quds (Jerusalén), en la que han atacado casas de los palestinos con balas y gases lacrimógenos, dejando muerte, heridos y arrestados. Y así seguirá sus bombardeos y sus ataques donde los niños son las víctimas más constantes, todo un genocidio, de ahí es que se producirá una tercera Intifada.
El día de la Tierra Palestina el mundo entero se levanta para exigir, basta de impunidad hacia Israel, por el continuo robo de la tierra de Palestina histórica!. Basta de colonización, de judaización, de crímenes de guerra; pues Palestina es Libre y Soberana.
Sdenka Saavedra Alfaro