En términos coránicos, Istidray es una de las Sunnah divinas inmutables y extendidas. En esta Sunnah, uno se ve arrastrado gradualmente hacia el abismo de la decadencia y la destrucción como resultado de la desobediencia a Dios y la insistencia en el pecado. En istidray, grupos de personas como los que niegan la verdad y los infieles reciben el castigo causado por su conducta.
Muchos pueblos que han rechazado los llamados de sus Profetas se han visto afectados por el istidray. A diferencia de algunos castigos divinos que llegan rápidamente, el istidray ocurre gradualmente. La cuestión del Istidray se analiza en dos versos del Corán: Versículo 182 de la Sura Al-A'raf: "En cuanto a aquellos que niegan Nuestros versos, los atraeremos (al castigo) poco a poco, de donde no podrán saber".
Versículo 44 de la Sura Al-Qalam: "Déjame a aquellos que rechazan el Corán, y los guiaré paso a paso hacia la destrucción, sin que lo sepan".
Estos versos describen cómo una persona, después de rechazar los versos divinos, cae en la trampa del istidray y es arrastrada a los pecados poco a poco. El concepto coránico de Istidray se refiere al distanciamiento gradual de Dios como resultado del olvido de Su presencia. Aquellos que rechazan la guía divina y fracasan repetidamente en las pruebas divinas finalmente quedan solos, e incluso se allana el camino para su caída, de modo que puedan acercarse a su fin poco auspicioso y recibir el castigo divino.
La Sunnah de istidray tiene algunos signos. Por ejemplo, no se activa en tiempos de dificultad y adversidad, pero se activa en una sociedad en decadencia en tiempos de bendición y prosperidad. Basado en esta Sunnah, Dios da tiempo a los malvados para preparar el terreno para la intensificación de su castigo en el más allá. Recibir bendiciones requiere gratitud; de lo contrario, Dios deja que la persona se las arregle sola y la castiga de acuerdo con la Sunnah de istidray. Una señal de castigo basada en la Sunnah de istidray es que mientras la persona se encuentra en buenas condiciones de vida desde el punto de vista material, se olvida por completo de Dios y no hay rastro de espiritualidad y rectitud en su vida.