Según la Agencia Noticiosa Ahlul Bait (ABNA) –Los guardias costeros de Bangladesh se han negado a permitir la entrada a decenas de refugiados musulmanes de la etnia rohinya, quienes estaban huyendo de la violencia en el estado occidental de Rajine, en Birmania, donde el gobierno continúe masacrando a los miembros de esta minoría musulmana.
El portavoz de la guardia costera bengalí, Sheij Fajr Uddin dijo el pasado sábado que los refugiados deportados incluían a mujeres y niños que habían denunciado un duro trato por parte de las fuerzas de seguridad birmana y grupos de vigilantes budistas.
"Encontramos dos heridos entre 18 hombres, junto con nueve mujeres y cuatro niños. Pero tuvimos que hacer que se devolvieran", dijo Fajr Uddin, añadiendo que el barco que transportaba a los refugiados rohinya en el río Naf, en la frontera entre Bangladesh y Birmania, tenía 31 personas a bordo cuando fue devuelto.
Desde que se inició una nueva ofensiva contra los musulmanes en Rajine hace meses, los rohinyas han intentado cada vez más ingresar en el barrio de Cox's Bazar, un distrito en el sureste de Bangladesh donde casi 400.000 refugiados rohinyas viven en campamentos miserables y asentamientos improvisados.
Esta foto fue tomada el 13 de julio del 2017 muestra a Moeyeyan Khatu, una mujer musulmana de la etnia rohinya sosteniendo una fotografía de su hijo Atthu Suwan, que fue apuñalado y tomado de su hogar el 4 de julio, en el pueblo de Maung Hnama, el municipio de Buthidaung en el estado de Rajine de Birmania [hoy desaparecido].
Bangladesh siempre ha lamentado el aumento en las llegadas de refugiados, diciendo que el país ya no es capaz de albergar a más refugiados.
La decisión de la Guardia Costera de devolver el barco de refugiado se produce después de que por lo menos 500 rohinyas huyesen de sus aldeas en Rajine y cruzaran la frontera de Cox’s Bazar.
Esta crisis humanitaria sucede después de que informes dijeran que Birmania había enviado refuerzos miliares a Rajine, movimiento que ha despertado nuevas preocupaciones y un aumento en la violencia anti-rohinya en la zona.
"Hemos reforzado nuestras patrullas en la Naf mientras el ejército (de Birmania) se está amotinando en las aldeas limítrofes, lo que puede llevar a los rohinyas a intentar nuevamente llegar a Bangladesh", ha dicho Fajr Uddin.
Las Naciones Unidas aún no se han pronunciado en imponer sanciones o reclamos contra la limpieza étnica de musulmanes impuesta por el gobierno birmano; la ONU se limita en mencionar que con la llegada de 70.000 aldeanos rohinyas a Bangladesh desde octubre pasado hasta la fecha podría causar graves problemas. El Enviado Especial de la ONU, Yanghee Lee, dijo recientemente que estaba preocupado por los informes de que un batallón del ejército de Birmania había llegado Rajine para ayudar al aparato de seguridad local [de represión], añadiendo que podría provocar más violencia y complicar aún más la situación.
Los musulmanes rohinyas, reúnen una comunidad de más de un millón de personas; este pueblo ha sido negado de reconocimiento y de serle otorgada la ciudadanía y el acceso a los derechos básicos, al vivir en país de la mayoría budista, quienes los ve como “intrusos provenientes del vecino Bangladesh”. Los rohinyas rechazan las afirmaciones sobre sus orígenes y dicen que sus antepasados han vivido en la zona durante siglos.
Traducido por ABNA24 redacción española
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