Según el relato, Saleh ash-Shami se encuentra entre los arrestados. Él es un “predicador” que proviene de la ciudad de Duma, en el campo de Damasco, y ha residido durante décadas en Arabia Saudí, donde trabajó como profesor en la Universidad Islámica Muhammad bin Saud hasta 1998.
Activistas señalan que Shami estuvo vinculado, desde el inicio de la guerra siria, al reclutamiento de militantes para sumarlos a grupos armados terroristas que operan en zonas fuera del control del Estado sirio.
En un contexto relacionado, los observadores vinculan la campaña de arrestos con informes de contactos indirectos sirio-saudíes en los últimos días, a través de un mensaje transmitido por el ministro de Relaciones Exteriores emiratí, Abdullah bin Zayed, durante su visita de este mes a Damasco, donde se reunió con el presidente Bashar al-Assad.
El diario libanés An-Nahar Al-Arabi confirmó, citando fuentes fiables del Golfo Pérsico, la existencia de una mediación emiratí entre Siria y Arabia Saudí en particular, y en las relaciones sirio-árabes en general.
Hace dos días, Egipto y Arabia Saudí emitieron un comunicado, durante una reunión con de los ministros de Exteriores de ambos países, en el que subrayaron la necesidad de apoyar la preservación de la independencia y la integridad territorial de Siria.