El primer ministro Hussein Arnus declaró que el plan abarca los diversos sectores- familiar, residencial, social y de servicios, y aclaró que el Gobierno estudia todas las opciones para indemnizar a los afectados.
Es necesaria la coordinación con todos los socios nacionales del sector empresarial, asociaciones civiles, sindicatos, federaciones y la comunidad local para implementarlo, aclaró el jefe del Ejecutivo.
Reveló que los daños por los sismos son muy grandes y abarcan varios sectores, lo cual requiere estudiar todas las propuestas presentadas para llegar a las fórmulas más adecuadas que contribuyan a enfrentar los impactos de este desastre, que afectó a miles de familias.
De acuerdo con una nota de prensa del Gabinete, el plan prevé apoyar los medios de vida y los servicios básicos en las áreas afectadas, y asegurar vivienda a los desplazados, además de completar la recopilación de datos.
Estipula también asegurar que la ayuda llegue a quienes la merecen, evaluar la realidad actual de las represas, rehabilitar las escuelas, hospitales, redes de agua y saneamiento, electricidad y comunicaciones, y reparar de inmediato los daños en carreteras, muros de contención y centros vitales.
Asimismo, considera que las empresas constructoras públicas nacional tienen prioridad en la ejecución de proyectos de rehabilitación de infraestructura dañada y trabajar en la construcción de complejos habitacionales y viviendas temporales.
Los terremotos que asolaron las provincias sirias de Alepo, Idleb, Latakia y Hama dejaron miles de muertos y heridos y gran devastación en viviendas e infraestructuras de servicios públicos.