Según la Agencia Internacional de Noticias Ahlul Bait (p.) – ABNA – el sermón decimocuarto de la Nahj al-Balagha, que forma parte de los discursos del Imam Alí (p.), fue pronunciado en reprobación a los habitantes de Basora y su apoyo a los instigadores de la sedición en el evento de la Batalla del Camello. Aunque algunos comentaristas consideran que este sermón fue pronunciado antes o después de esta batalla, casi todos coinciden en la conexión temática entre los sermones 13 y 14, considerándolas como extractos de un único discurso.
Aunque el Imam Alí (p.) pronunció este sermón dirigiéndose al pueblo de Basora, las características que describe para ciertos individuos y movimientos políticos son cualidades universales aplicables a todos los seres humanos en todas las épocas. Por lo tanto, cada persona debe reflexionar cuidadosamente sobre estas palabras y, al evitar estas características indeseables, protegerse de convertirse en blanco de arqueros, presa de depredadores o caza fácil para los cazadores.
El Amir al-Mu’minin (p.) en este sermón declara: «أَرْضُکُمْ قَرِیبَةٌ مِنَ الْمَاءِ بَعِیدَةٌ مِنَ السَّمَاءِ، خَفَّتْ عُقُولُکُمْ وَ سَفِهَتْ حُلُومُکُمْ، فَأَنْتُمْ غَرَضٌ لِنَابِلٍ وَ أُکْلَةٌ لِآکِلٍ وَ فَرِیسَةٌ لِصَائِلٍ.» (Traducción: Vuestra tierra está cerca del mar y lejos del cielo. Vuestros intelectos son ligeros y vuestras prudencias son necias. Por lo tanto, sois blanco de todo arquero, bocado de todo devorador y presa de todo cazador).
En la primera parte de estas frases se dice: «أَرْضُکُمْ قَرِیبَةٌ مِنَ الْمَاءِ بَعِیدَةٌ مِنَ السَّمَاءِ, vuestra tierra está cerca del mar y lejos del cielo». Parece que el significado de esta frase va más allá de una simple descripción geográfica de una ciudad. Algunos comentaristas de la Nahj al-Balagha han interpretado la cercanía al agua como «la cercanía y accesibilidad al Imam»; sin embargo, este pueblo, debido a su falta de atención a esta gran bendición, está «lejos del cielo y de las altas enseñanzas, es decir, de la cercanía a Dios y a Sus representantes».
En la segunda frase, el Imam enumera dos características más de este pueblo: «خَفَّتْ عُقُولُکُمْ وَ سَفِهَتْ حُلُومُکُمْ, vuestros intelectos son ligeros y vuestras prudencias son necias». Aunque estas dos expresiones parecen transmitir un mismo significado a primera vista, un análisis cuidadoso de los términos «عقل» (intelecto) y su plural «عقول» (intelectos), así como de la palabra «حلم» (prudencia) y su plural «حلوم» (prudencias), puede aclarar la diferencia entre ambos. «Intelecto» se refiere a la capacidad de gestionar integralmente, analizar todos los aspectos de una situación y planificar la ejecución de decisiones; mientras que «prudencia» alude a la capacidad de ejercer un autocontrol inteligente para llevar a cabo dichas decisiones. Así, se puede decir que el Imam describe a este pueblo como personas de «intelecto débil» (incapaces de analizar con precisión los eventos y circunstancias) y también como «necios impacientes» (incapaces de analizar correctamente los acontecimientos y carentes de paciencia para aceptar decisiones sabias de otros).
El resultado natural de estas características –es decir, «la lejanía del liderazgo», «la falta de intelecto», la incapacidad para analizar correctamente los eventos y tomar decisiones adecuadas, y la «falta de prudencia y paciencia» para esperar el momento adecuado para ejecutar cada decisión– genera cualidades en el ser humano que lo convierten en un blanco fácil, un bocado apetitoso y una presa accesible para los enemigos; tal como el Imam Alí (p.) continúa diciendo: «أَنْتُمْ غَرَضٌ لِنَابِلٍ وَ أُکْلَةٌ لِآکِلٍ وَ فَرِیسَةٌ لِصَائِلٍ. Por lo tanto, sois blanco de todo arquero, bocado de todo devorador y presa de todo cazador».
La aplicación de estas características a aquellos que, sin prestar atención a las palabras de su líder, dan oídos a los medios extranjeros y a los rumores de las redes sociales, y que, sin fundamentos sólidos de fe o incluso de intelecto, toman decisiones políticas y económicas «insensatas y necias» para sí mismos o para la sociedad, no necesita mayor explicación.
Este fenómeno es ahora tan evidente que en muchos espacios mediáticos creados por medios extranjeros se apuesta abiertamente por la «estupidez del público». Publican diariamente miles de rumores y mentiras, sabiendo que lo que difunden son falsedades que solo son aceptables para un público de «intelecto débil e impaciente», con el fin de convertirlos en blanco de sus flechas y en presas fáciles para los enemigos de la fe y de Irán, para que sean más fácilmente devorados.
Seyyed Ali Asghar Hosseini / ABNA
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