Agencia Noticiosa Ahlul-Bait (P)

Fuentes : Iqna
martes

30 enero 2024

21:19:12
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Bendiciones del cielo más allá de la comprensión y la imaginación humanas

SANTIAGO. (ABNA) – Las bendiciones que los creyentes disfrutarán en el cielo son incomprensibles para nosotros ya que el más allá es un mundo muy superior, más grande y más elevado que este mundo.

Por lo tanto, sólo podemos tener una idea de estas bendiciones si las comparamos con las bendiciones y los placeres de este mundo. Para nosotros, personas que vivimos en este mundo limitado, comprender las dimensiones de las bendiciones del cielo es muy difícil, incluso imposible. La diferencia entre ambos es como la diferencia entre una gota de agua y un río. El Sagrado Corán dice en el versículo 35 de la Sura Qaaf: “Allí (en el paraíso) tienes todo lo que deseas, y con Nosotros hay mucho más”. El paraíso eterno prometido por Dios a las personas de fe y Taqwa (piedad y temor de Dios) es una buena noticia con respecto al Ghayb (invisible) y uno nunca podrá comprender su valor y esencia en este mundo. Es imposible darse cuenta del grado de alegría y felicidad que uno obtendrá al estar en Ghurb (cercanía a Dios). Por eso a la gente sólo se le dice que la promesa divina de dar esas recompensas es cierta: “Serán admitidos en los Jardines del Edén (paraíso), que es la promesa invisible del Dios Compasivo a Sus siervos. La promesa de Dios ciertamente se hará realidad”. (Verso 61 de la Sura Mariam) 

El hecho de que en este versículo se haga referencia al paraíso como jardines (en plural) muestra que consta de innumerables jardines llenos de bendiciones para los creyentes piadosos. La palabra Edén implica la eternidad del paraíso, ya que no es como los jardines y las bendiciones de este mundo que llegan a su fin un día. Una de las mayores preocupaciones y ansiedades acerca de las bendiciones de este mundo es el hecho de que eventualmente desaparecerán, pero no existe tal preocupación acerca de las bendiciones del paraíso. La palabra "siervos" en este versículo se refiere a siervos creyentes de Dios, no todos, y la palabra invisible se refiere al hecho de que creen en lo que no pueden ver. 

Otro punto aquí es que las bendiciones del paraíso son tales que ningún ojo las ha visto ni ningún oído ha oído hablar de lo que realmente son. Están más allá de nuestra imaginación y nuestra comprensión.