En otros capítulos del Corán, como Surah Al-Insan, Surah Ar-Rahman y Surah Ad-Dujan, también hay referencias a diferentes tipos de manantiales en el paraíso. El Corán se refiere a Yannat (plural de Yannah) destacando la existencia de numerosos jardines y Anhar (plural de Nahr) destacando la existencia de varios ríos en el paraíso. Pero en Surah Muhammad, versículo 15, describe el paraíso destacando cuatro ríos específicos: Imagen del Jardín prometido a quienes temen a Dios: habrá en él arroyos de agua incorruptible, arroyos de leche de gusto inalterable, arroyos de vino, delicia de los bebedores, arroyos de depurada miel. Tendrán en él toda clase de frutas y perdón de su Señor.
¿Serán como quienes están en el Fuego por toda la eternidad, a los que se da de beber un agua muy caliente que les roe las entrañas? (15)
El agua, la leche, el vino y la miel de estos ríos son diferentes a los de la tierra. El agua está libre de cualquier contaminación o elementos que cambien su sabor, olor o color. La leche también es tal que su sabor, gusto y aroma no cambian. La miel es pura, filtrada y clara. En cuanto al vino, hay aclaraciones en otros capítulos. Según el versículo 47 de la Surah Saffat, “no hay en él enfermedad ni intoxicación”.
Y en el versículo 19 de la Sura Al-Waqi’ah, Dios dice que “no les causará ninguna intoxicación ni enfermedad”.
La gente del paraíso recibirá este vino puro de Dios: “Su Señor les dará de beber vino puro”. (Verso 21 de la Sura Al-Insan)
Para que el vino no sólo sea Tahir (puro) sino también purificante.