Irán ha condenado enérgicamente las repetidas violaciones del alto el fuego en Gaza por parte de Israel, así como el reciente ataque del régimen que ha dejado 11 palestinos muertos.
Cuando Donald Trump anunció su propuesta para poner fin a la guerra en Gaza, muchos la recibieron como un “plan de paz histórico”. Sin embargo, al examinarla con detalle, lo que aparece no es un acuerdo de paz consolidado, sino un alto al fuego condicionado, una pausa con más preguntas que respuestas.
La distribución de ayuda alimentaria en la Franja de Gaza, llevada a cabo por la “Fundación Humanitaria de Gaza” con el respaldo de Israel y Estados Unidos, ha resultado en la muerte de más de 500 palestinos que acudían a estos centros para recibir alimentos.
Decenas de miles de personas han salido este sábado a las calles de la capital italiana para exigir el fin de la guerra israelí contra la Franja de Gaza y denunciar la complicidad del Gobierno de Giorgia Meloni en lo que califican de genocidio en curso.
El líder de la oración del viernes en Bagdad, Irak, se refirió a los acontecimientos en Gaza y Yemen como una prueba de la vacuidad de los eslóganes de Estados Unidos sobre la paz.
Según informó la Agencia Internacional de Noticias Ahl al-Bayt (ABNA), los palestinos en la Franja de Gaza, bajo el bloqueo y los ataques de las fuerzas sionistas, luchan por sobrevivir con recursos limitados. Aquellos que se han refugiado en una escuela en la ciudad de Gaza enfrentan serias dificultades para acceder a alimentos y otros bienes esenciales.